La reforma de la calle Progreso no solo servirá para reforzar la seguridad viaria, otorgando un espacio mucho más amplio para los peatones, sino también para dotar al céntrico vial de un importante lavado de cara. El proyecto, cuyo presupuesto asciende a unos 2,5 millones de euros, contempla la dotación de zonas verdes, una de las cuales propiciará la eliminación de un foco de suciedad, situado en las inmediaciones del cruce con la avenida Madrid.
Se trata de una antigua parcela, de titularidad municipal, que se encuentra en un estado de abandono que ha sido denunciado en varias ocasiones por vecinos del casco urbano. A pesar de que la finca permanece cerrada al público desde hace años, esto no ha impedido que se haya convertido en foco de vertidos ilegales. Paraguas destrozados, botellas de vidrio y de plástico otros residuos sólidos se acumulan en el terreno. No obstante, la empresa adjudicataria, Covsa, procederá a limpiar el espacio, que pasará a estar abierto al público, lo que también podría facilitar la ampliación de las escaleras que unen Progreso y Madrid, y que están colindantes al cierre perimetral de la parcela.
Recuperar este espacio es una vieja pretensión del Concello. Hace cuatro años, la Administración municipal se planteó urbanizar la zona y reconvertirla en una plaza pública. Sin embargo, ni el cuatripartito primero ni el ahora bipartito dio prioridad a la actuación. Se da la circunstancia de que en este espacio se encontraba un antiguo lavadero, por el que pasaba el río Navilón, un regato cuyo origen se encuentra en el lugar de Miraflores y que desemboca entre las playas urbanas de A Carabuxeira y Lavapanos. En el proyecto inicial, se contemplaba la canalización del riachuelo y la ampliación del callejón contiguo.
Por otro lado, el Gobierno local negó el lunes tajantemente que el proyecto de rehabilitación de Progreso haya sido modificado. "A nadie le entra en la cabeza hacer eso una vez está adjudicado", aseveraron los dirigentes municipales, en respuesta a la responsable de Cuidadanos, Vanessa Rodríguez, después de que esta asegurase que las peticiones realizadas por residentes y vecinos sirvieron para cambiar algunos de los trabajos que figuraban en el documento original.
"Como (Rodríguez) comprobó en la reunión informativa del 16 de noviembre que habíamos hecho los deberes, argumentó que habíamos cambiado el proyecto, lo cual es rotundamente falso", aseveró el bipartito.
Peticiones
"En pleno siglo XXI lo que la gente sigue demandando son arreglos de viales municipales, aceras, más puntos de luz, limpieza e, incluso, red de alcantarillado", señaló.
