La reorganización del tráfico en el núcleo urbano de Sanxenxo, que afectará a algunos de sus viales más importantes, se ejecutará en plena noche, a fin de que causar las menores molestias posibles tanto a los vecinos como a los operarios y agentes municipales, que podrán aplicar esta medida en una hora en la que apenas habrá tránsito de vehículos.
Las modificaciones entrarán en vigor en la madrugada del viernes al sábado, aproximadamente a las seis de la mañana, según señaló este miércoles el Concello, que se muestra convencido de que los cambios servirán para facilitar el acceso al centro neurálgico comercial y hostelero de la villa de la comarca de O Salnés.
Cabe recordar que las principales novedades afectan a la calle Luis Vidal Rocha, que pasa a ser de bajada, y al Paseo de Silgar. Una vez llegado al cruce de ambos viales, los conductores tendrán la posibilidad de elegir entre girar a la derecha, en dirección a Baltar, o a la izquierda, para acceder al Puerto Deportivo Juan Carlos I. De esta forma, la avenida de Madrid pasará a ser de salida desde la dársena hasta la calle Cesteiros, que desemboca en la calle Progreso a la altura del antiguo Eroski. Allí, los vehículos podrán incorporarse hacia la izquierda o la derecha, después de una modificación de última hora realizada por el Concello, a petición de diferentes colectivos.
La Administración local entiende que esta reorganización del tráfico facilitará la entrada al Puerto Deportivo de la mayoría de los vehículos que acuden a Sanxenxo desde la Autovía do Salnés. Si antes se veían obligados a atravesar buena parte de Progreso para tomar la avenida Madrid y, desde ahí, llegar al recinto portuario y al parking de Nauta Sanxenxo, ahora les bastará con bajar por Castelao, a la altura de la nueva rotonda instalada en las inmediaciones del Hotel La Terraza, para llegar a su destino.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha alcanzado un acuerdo con el propietario de una parcela situada en las inmediaciones de la calle Cesteiros para utilizarla como aparcamiento disuasorio. Se trata de un terreno de 2.000 metros cuadrados, con capacidad para acoger a unos 80 vehículos aproximadamente.
El Concello ha tomado esta decisión para tratar de facilitar el estacionamiento durante la temporada estival. Además, el Gobierno local recuerda que también existen otras explanadas en las que aparcar, como la situada al lado del Templo Nuevo o cerca de la guardería O Tombo.
