Sanxenxo prevé una inversión de 1,7 millones para el Pazo de Quintáns

La segunda fase de equipamiento, dotación digital y ajardinamiento optará a los 'Next Generation'
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photo_camera Se contempla la instalación de una carpa de eventos en uno de los jardines del Pazo. GONZALO GARCÍA

Desde que hace poco más de un año finalizara la primera fase de recuperación del emblemático Pazo de Quintáns, situado en la parroquia de Noalla, ya han sido muchos los grupos de visitantes que han podido acceder a su interior y conocer la significativa historia del que es uno de los emblemas del municipio.

Si bien el Pazo, declarado Ben de Interese Cultural, luce ya una nueva carpintería interior, con la remodelación de sus edificios y el acondicionamiento de la plaza y el patio interior, con una inversion de 1,8 millones, el proyecto es mucho más ambicioso.

Y es precisamente ahora, cuando tendrá continuidad. De este modo, el Gobierno local ha anunciado que la segunda fase optará a los fondos europeos 'Next Generation' con una nueva inversión de 1,7 millones.

Esta segunda fase, que casi iguala a la primera inversión, prevé convertir el edificio y su entorno en un "nuevo polo turístico que permita diversificar la oferta y poner en valor el patrimonio del municipio". De este modo, el proyecto consta de cuatro ejes de actuación: creación del Centro de la Cultura Gastronómica Rías Baixas, mejora del entorno, dotación digital y sistemas ecoeficientes.

Además de la dotación de mobiliario y contenidos, se llevará a cabo una recuperación medioambiental de los jardines exteriores y las huertas tradicionales. La actuación incluye un programa de recuperación de plantas tradicionales que mejorará considerablemente el entorno y se desarrollarán tareas de conservación y recuperación de especies, además de investigar métodos de cultivo regenerativos del suelo. La regeneración del suelo contribuirá a la captación de CO2 y a la mitigación del cambio climático y se recuperará el hórreo.

En cuanto a la dotación ecoeficiente, espacios como el museográfico tendrán iluminación led, sensores de movimiento y tecnología para regular el caudal de agua en los aseos, además de una tecnología en las conexiones para evitar incendios.

El proyecto incluye experiencias inmersivas para potenciar los principales atractivos del territorio, por lo que se convertirá en un espacio de disfrute cultural y gastronómico, donde el visitante podrá interactuar con los productos locales.

Objetivo: Centro de la Cultura Gastronómica
El objetivo del Gobierno local pasa por convertir el espacio en un Centro de la Cultura Gastronómica de las Rías Baixas con un carácter "multidisciplinar, con fuerte calado cultural, pero también experiencial, basado en los valores territoriales en la gastronomía local y su interrelación con el territorio".

Así, se dotará de contenidos museográficos, de suministros y mobiliario y, por lo tanto, se convertirá en un "escaparate que muestre y difunda la cultura y patrimonio asociados con espacios de descubrimiento, degustación y de encuentro".

Tal y como había adelantado este medio, se formuló una petición para llevar al Pazo parte de las piezas de la excavación de A Lanzada. La propuesta incluye la creación de un invernadero para eventos, con una agenda de eventos gastroculturales que pongan en valor la riqueza del territorio y se contempla el acondicionamiento de un estacionamiento exterior que mejorará el control de flujos en el entorno del Pazo.

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