PONTEVEDRA. Las rebajas de enero dan hoy el pistoletazo de salida en toda la comunidad gallega. Y lo harán bajo la atenta mirada de un nuevo cuerpo de inspectores creados a principios del año pasado al amparo de la Lei do Comercio de Galicia. Estos funcionarios velarán, por primera vez desde la creación de su división, por el correcto desarrollo de los saldos de invierno.
El trabajo de estos trabajadores del cuerpo de gestión de la Administración autonómica se inició el mes pasado en establecimientos de las principales ciudades gallegas. Lo hizo con el objetivo de evitar fraudes en horarios y en la aplicación de descuentos. Las labores de vigilancia y asesoramiento se realizarán en dos fases, antes y después de las rebajas. En la primera de ellas, ejecutada en diciembre, se controlaron más de 140 comercios seleccionados de forma aleatoria en la comunidad. «En Pontevedra capital también se han vigilado establecimientos», aseguran representantes de la Consellería de Economía e Industria, departamento que coordina la campaña.
La nueva normativa autonómica exige que las campañas de promoción que se lleven a cabo durante el mes anterior a las rebajas sean comunicadas a la Administración. También prohíbe a los establecimientos comerciales que participen en los saldos de invierno o verano exhibir carteles con descuentos u oportunidades durante el mes anterior a la fecha de inicio de la campaña de rebajas. El incumplimiento de este último punto se considera como una falta grave en la Lei do Comercio, que prevé sanciones de entre 1.501 y 50.000 euros para quienes se salten la obligación.
(Más información en nuestra edición impresa del sábado, 7 de enero)
