Confiesa los hechos tras ser cazado con cocaína para la venta en la ropa interior

Agentes de la Policía Local lograron interceptar a un supuesto trapichero, que terminó por confesar sus crímenes, tras una persecución por varias calles de la ciudad ocurrida durante la noche, la semana pasada.

Los hechos se iniciaron en las inmediaciones de la Praza da Ferrería, donde dos agentes que efectuaban labores de vigilancia avistaron a dos personas que, a su entender, habían establecido contacto para una transacción de sustancias estupefacientes.

En un momento dado, ambos se aperciben de la presencia policial y deciden huir. Los policías decidieron perseguir a quien, según los indicios que manejaban, debía ser el vendedor de la droga, que se escapó en dirección a la zona monumental, pero que terminó siendo interceptado en las inmediaciones de Cobián Roffignac.

Una vez en manos de la Policía, el detenido intentó ocultar algo en una de sus mangas. Los agentes le pidieron que se lo entregase. Se trataba de una papelina con medio gramo de cocaína preparada para su venta al menudeo.

A continuación, consciente de que iban a cachearle, el supuesto trapichero sacó de su ropa interior una bolsita con otros tres envoltorios de medio gramo, además de 255 euros en billetes pequeños. Acto seguido, según los agentes, el sospechoso se derrumbó y confesó que se dedicaba a la venta de sustancias estupefacientes al por menor en la ciudad.

A continuación, a instancias de los funcionarios policiales, el individuo que resultaría detenido les entregó un bote de arroz que guardaba en su domicilio y en el que conservaba otras 34 papelinas de cocaína preparadas para su puesta en el mercado ilícito.

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