Denuncia a su hermana por el robo de flores de la tumba de su padre

José Carlos Solla Blanco (Foto: DP)
photo_camera José Carlos Solla Blanco (Foto: DP)

PONTEVEDRA. Las herencias son en ocasiones motivo de importantes disputas entre familiares. Este es el caso, según parece, de la familia de José Carlos Solla Castro, vecino del lugar de Filgueira, en Xeve, fallecido en diciembre de 2011. Su hijo José Carlos, que, según él mismo asegura, se encargó de todos sus cuidados durante los últimos años de su vida (padecía alzhéimer y lupus), se halla en la actualidad en litigios con su madre por la titularidad de la vivienda. Sin embargo, lo que más le preocupa ahora, según dice, son los continuos hurtos de los que está siendo objeto por parte de una de sus hermanas, a quien acusa, denuncia policial mediante, de sustraer las flores que él deposita ante la tumba de su progenitor, en el cementerio de San Mauro, para sustituirlas por otras.

En el escrito interpuesto el pasado 22 de marzo en la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano (ODAC) de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional de Pontevedra detalla hechos ocurridos el 19 de marzo, Día del Padre, en el citado camposanto municipal, explicando que "fui al cementerio a la tumba de mi padre y dejé un ramo de flores y dos sobres que contenían sendas cartas dentro. Cuando abandonaba el cementerio observé que entraba mi hermana".

José Carlos detalla en la denuncia que para evitar cruzarse con ella, debido a que en otras ocasiones le provoca "para tener enfrentamientos", dio una vuelta por otro de los pasillos. "Desde una esquina observé cómo mi hermana cogía las flores y los sobres y se los llevaba del cementerio".

José Carlos puso de manifiesto ante los agentes de la Policía Nacional que hace un año y medio falleció su padre, al cual cuidaba, y que desde entonces tiene problemas con sus hermanas y con su madre debido a discrepancias con la herencia, y dejó claro en las dependencias policiales de Joaquín Costa que su hermana le sustrajo las flores.

Precedentes. José Carlos Solla Blanco explicó a este periódico que "en agosto de 2007 mi madre se fue, le pidió el divorcio a mi padre y una manutención de 300 euros. Mis hermanas y ella le dejaron sin dinero".

El único hijo varón del fallecido, exmiembro de La Legión, detalló que ante la nueva situación "un juez me hizo tutor legal de mi padre, y yo me dediqué a él por completo, preparándole los papeles de la incapacidad, de la minusvalía. En ningún momento me preocupé de que mi padre redactase un testamento y, en vista de lo que sucede ahora, creo que fui tonto por ello", añadió.

"Mi madre venía a casa a meterse con él con la excusa de que venía a verle. Se llevaba el correo, incluso en una ocasión entró con una orden judicial para llevarse algunas pertenencias".

El denunciante manifestó que desde el primer momento su madre y sus dos hermanas trataron de que la Justicia le retirase la tutoría legal de su padre. "Estuvieron recogiendo firmas por el pueblo", dijo.

Otro de los episodios de tensión tuvo lugar en el tanatorio, horas después del fallecimiento de José Carlos (el padre). "Llamé a mi hermana ya en el tanatorio. Allí se presentaron muchos y ella se puso a mi lado. Yo me encontré mal. Esa misma noche ellos reclamaron la autopsia de mi padre porque desconfiaban de las causas de su muerte que, por su puesto, se demostró natural".

El denunciante sostiene que el objetivo de sus familiares es la casa. "Mi madre dice que le pertenece la mitad, pero pienso que le pertenece el ladrillo, no el suelo".

Mientras, el cuerpo de su padre descansa en San Mauro, al menos por ahora. "Quiero incinerarlo, pero por la autopsia ahora tiene que permanecer ahí un tiempo. Pero ellas no tienen que tocar nada allí, yo lo pago y es algo mío, privado", concluyó.

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