Detenido por agredir a su pareja e intentar acuchillar a su hijastro

 La urbanización de Monte Porreiro volvió a registrar un grave episodio de violencia de género el pasado fin de semana. Los hechos, protagonizados por un varón de mediana edad, se registraron a última hora de la tarde del sábado, a plena luz del día, con testigos presenciales de gran parte de lo ocurrido. El sospechoso, que fue detenido por un delito de maltrato en el ámbito familiar y otro de intento de lesiones (con arma blanca) agredió a su pareja e intentó acuchillar a su hijastro en plena calle Bélgica. Sin embargo, según explican los que presenciaron la secuencia, su suerte fue muy distinta a la que se esperaba, pues terminó con varios golpes (que le propinó el joven al que amenazó con un cuchillo) y en los calabozos de la Comisaría Provincial.

La discusión comenzó, según los vecinos, en el interior del hogar familiar. En un momento dado, sobre las nueve de la noche, el ahora detenido abandonó el inmueble (en el número siete de la calle Bélgica, en pleno centro de Monte Porreiro), cuchillo en mano, y se dirigió a su hijastro con la intención de clavárselo. El joven se encontraba acompañado por algunos amigos, y entre todos consiguieron arrebatar el arma al agresor. Se desconoce si en el interior del piso ya se había producido un primer rifirrafe entre la pareja.

Agresión

El presunto maltratador, al verse desarmado, decidió regresar a su casa. Su pareja, que al parecer sospechaba de las intenciones, bajaba a su encuentro en ese mismo instante y, el ahora arrestado, ni corto ni perezoso, decidió agredirla allí mismo. Sin embargo, no contó con que su hijastro (hijo de la mujer que acababa de golpear) estaba presenciando la escena, y salió corriendo tras él hasta que le ‘ajustició’ unos pasos más adelante (propinándole algunos golpes, según explicaron los vecinos del lugar).

Entre tanto, la Policía Nacional ya se encontraba en camino, alertada por los testigos de los hechos. Instantes después, varias patrullas llegaron a la calle Bélgica, y los agentes se entrevistaron con los allí presentes para recabar información acerca de lo sucedido. El presunto maltratador, mientras, decidió refugiarse en su casa, de donde parecía, según testigos, no querer salir.

Arresto

Los funcionarios policiales, en vista de las evidencias de los hechos, subieron a la vivienda y procedieron a la detención del sospechoso, que fue trasladado a las dependencias policiales de Joaquín Costa. Los agentes regresaron al día siguiente (el domingo) al lugar de los hechos, tal vez para entrevistarse con algún testigo con el que no pudieron hablar lo suficiente para recabar toda la información necesaria, y con todos los datos (incluidas las declaraciones de todos los protagonistas) efectuaron el correspondiente atestado judicial. Precisamente serán las autoridades judiciales las que se encarguen de dictaminar el futuro que le espera a este supuesto maltratador. Lo habitual en este tipo de casos es que se le imponga una orden de alejamiento del hogar familiar, a pesar de que tiene, según relataron los vecinos de la zona, otros dos hijos con la mujer a la que supuestamente agredió el sábado por la tarde.

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