El BNG presentará una moción para que Ence y Elnosa salgan de la ría antes de 2018

PONTEVEDRA. La posible permanencia de Ence y Elnosa en la ría ha movilizado a los concellos en los que el BNG gobierna con o sin mayoría absoluta. La intención de esta nuevo frente nacionalista es que el complejo industrial de Lourizán se traslade para así recuperar un espacio -sobre el que se han asentado otras infraestructuras como la depuradora de aguas residuales- que se pretende aprovechar para generar actividades vinculadas al turismo o al marisqueo. Por este motivo, el BNG pontevedrés presentará al Pleno del próximo día 18 una moción en la que instará a las administraciones competentes a mantengan su compromiso para que tanto la pastera como la clorera no se perpetúen en su actual ubicación. La iniciativa cuenta ya con el respaldo del Bloque de Bueu, que este mismo mes aprobó en sesión plenaria su rechazo a que ambas industrias puedan mantenerse en Lourizán más allá de 2018, y de Poio.

Lores espera que su socio de Gobierno en Pontevedra, el PSOE, apoye su moción. El texto deberá pactarse durante los próximos días con los socialistas, que pondrán condiciones al mismo.

«Lo que está claro es que no nos valdrá cualquier cosa. No nos vale cualquier condena porque estoy harto de realizar condenas políticas que no llegan a ningún sitio», explicó ayer el concejal de Deportes, Agustín Fernández. El edil socialista, que habló en representación del jefe del grupo municipal, Antón Louro, abrió así la puerta a la posible judicialización del conflicto por la permanencia del recinto industrial de Lourizán.

Comité y plantilla

El alcalde capitalino restó ayer credibilidad al informe que la consultora KPMG realizó a petición de Ence. En él, el grupo presidido por Juan Luis Arregui destaca que el valor económico del centro de operaciones de Lourizán equivale al 28,16% del PIB del municipio de Pontevedra y que la compañía genera en Galicia 5.048 puestos de trabajo. De ellos, 329 son directos (es decir, plantilla propia), 3.186 indirectos (básicamente proveedores) y los 1.173 restantes inducidos (empleos generados por los gastos que estos trabajadores directos e indirectos realizan en su entorno).

«Hai algunhas cousas dese estudo que son esaxeradas», dijo ayer Lores, que recordó que Ence ha reducido su plantilla en Lourizán en los últimos años. «A empresa chegou a ter un plantel por riba dos 600 empregados. E agora ten menos de 260. Non o digo eu, dino os cálculos dos delegados sindicais», explicó.

Efectivamente, la compañía ha reducido su cuadro de personal de fábrica, un dato que se desprende de la inminente reducción de delegados sindicales, que pasarán de trece a nueve en las próximas elecciones previstas para principios del año que viene. El número de trabajadores en planta es actualmente de unas 230 personas (prejubilados incluidos), tal y como confirmaron ayer fuentes del comité. Pero el empleo generado por Ence en su centro de operaciones es mayor, ya que da trabajo a unas 88 personas más en las oficinas centrales y que dependen de un comité de empresa distinto al de la factoría.

La plantilla del grupo Ence negocia la mejora de salarios y jornada laboral con la compañía, dos puntos que han provocado tensiones en las negociaciones que ayer finalizaron en Madrid. Parte social y patronal volverán a verse las caras la semana que viene para tratar de llegar a un punto común para establecer las nuevas condiciones de 982 trabajadores que la compañía tiene a nivel estatal.

Motivación

La Plataforma 2018, un movimiento formado por 32 colectivos, instó ayer a la población de la comarca a secundar la manifestación que el próximo 23 de noviembre se celebrará desde A Ferrería para reclamarla salida de Ence y Elnosa de la ría en 2018. «A prórroga dada pola Xunta á cloreira para seguir en Lourizán ata 2017 e non ata 2014 fíxonos reaccionar», explicó ayer Antía Marinho, una de las portavoces de la plataforma.

El colectivo, que busca el apoyo de las fuerzas vivas de la comarca, ha convocado un acto de protesta para este sábado en A Peregrina. Allí plantarán varios eucaliptos de forma simbólica para denunciar «os efectos negativos» del monocultivo de este árbol en los montes gallegos «e para que se saiba o que significa a permanencia de Ence».

La Plataforma 2018 denunciará el sábado los «efectos negativos» del eucalipto con una plantación simbólica en A Peregrina

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