El concejal de Economía e Facenda, Raimundo González, mostró esta mañana la preocupación del Concello de Pontevedra por la nueva ley del canon del agua, que la Xunta de Galicia elabora y que está en fase de anteproyecto, ya que aseguró que, de entrar en vigor, el nuevo canon implicará un incremento de un 400% con respecto al que hoy en día pagan las familias pontevedresas.
El gravamen viene reflejado en la factura del agua que cada dos meses emite el Concello a través de la empresa concesionaria Aquagest y, en este recibo, se cobra el consumo del agua, la cuota de la basura y también el canon de saneamiento, siendo los dos primeros cobros municipales, mientras que el último es un tributo indirecto de la Xunta de Galicia, que se ha de cobrar por ley.
El concejal nacionalista adelantó esta mañana que el anteproyecto del canon del agua que elabora la Xunta sustituirá el actual canon de saneamiento y, aunque cambie la normativa, manifestó que "la ley en esencia es la misma y de hecho, el único cambio son las tarifas".
Según Raimundo González, este canon se impuso en el año 1993 y suponía 15 pesetas. Tuvo una subida en el año 2004, por lo que en la actualidad es de 0,209 euros por cada metro cúbico de agua consumido, de forma que, según las cuentas municipales, en la actualidad, con el canon de saneamiento, una familia de tres miembros, con un consumo de unos 30 metros cúbicos de agua al mes, tiene un gasto de 6 euros cada dos meses.
Sin embargo, denunció que el nuevo canon del agua supone una subida de un 400% para las familias, ya que en el actual se impone una tarifa fija de 1,5 euros, "a la que habrá que añadir una parte variable en función tanto del consumo, como hasta ahora, como del número de personas del núcleo familiar", dijo. Además, con respecto a los negocios "cambia la cuota si los consumos son inferiores a los 2.000 metros cúbicos de consumo, mientras que antes era anterior a 3.000 metros cúbicos", añadió.
Raimundo González indicó que la modificación de la normativa "tiene un objetivo puramente recaudatorio" y podrían alcanzarse cifras similares de recaudación si se "exprime" la actual ley actualizando los padrones y persiguiendo los impagos, "que son muchos", aseguró el concejal.
El concejal de Facenda adelantó que "el Concello hará lo que esté en su mano para que este anteproyecto de ley no salga adelante, por eso acudiremos al gobierno de la Xunta a través de los grupos parlamentarios", y quiso dejar claro que "este incremento no es del Concello, sino de la Xunta de Galicia", ya que el gobierno municipal volverá a congelar las tasas e impuestos este año, "por lo que la subida que observen los pontevedreses en este recibo será por decisión de la Xunta de Galicia", señaló.
"Supone un perjuicio para todo el mundo, especialmente en esta situación de crisis económica porque las empresas y las familias lo están pasando muy mal", concluyó Raimundo González.
