O Concello de Pontevedra embargó un total de 26 viviendas el año pasado a través de la empresa encargada de la Recaudación y Gestión municipal (Recyges) por impago de recibos municipales y multas de tráfico.
A pesar de que finalmente sólo se ejecutaron 26 embargos, el Ayuntamiento capitalino envió notificaciones de incautaciones de inmuebles a 65 pontevedreses, así como a sus copropietarios o conxuxes, que una vez conocida la intención del Ejecutivo Local, decidieron saldar sus deudas pendientes en los plazos establecidos. Asimesmo, Recyges ya comenzara el proceso para solicitar información de 109 deudores de la Hacienda Municipal, concretamente sobre los datos del patrimonio inscrito a su nombre.
Asimesmo, el Concello de Pontevedra solicitó también en el Registro de la Propiedad a actuación de los peritos con el fin de tasar el valor de estos inmuebles para fijar un precio mínimo en la subasta de la subasta pública, que constituye el siguiente paso para recuperar los cartos del imponerte de los recibos no pagados en la fase voluntaria por los deudores.
Asimesmo, Recyges contabilizó a más de 16.000 pontevedreses que no pagaron sus impuestos a tiempo. Concretamente, fueron 16.125 los deudores sobre los que se solicitó información, bien mediante notificación personal, mediante la publicación de edictos en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) o a través de internet. Además de estos, se investigaron más de 16.ooo cuentas bancarias, de las cuales se embargaron 12.607, lo que supuso para las arcas municipales una recaudación de 518.100 euros.
En el tocante al embargo de los sueldos de los pontevedreses, el Ayuntamiento capitalino fijo efectiva la retención de 231 salarios, aunque las órdenes de requisamento de los mismos fueron superiores a 380.
Nembargantes, en los casos restantes los deudores ya no trabajaban en las empresas, cobraban cantidades inferiores al límite embragable o ya habían pagado la deuda.
Por otra parte, el Concello de Pontevedra también requisou un total de 48 vehículos, después de que se había anunciado por los cauces pertinentes y se agotaran todos los plazos para pagar las deudas. De hecho, en un primero momento se habían notificado a 275 deudores la intención de embargo y se remitieron al Registro Mercantil 122 órdenes de requisamento.
Lo imponerte de todos los recibos impagados en el período voluntario a la Hacienda Municipal durante a año pasado ascendió la un total de 3.915. 850 euros.
La diferencia con el año 2006 señala que cada vez más pontevedreses pagan sus deudas en la fase voluntaria, puesto que se produjo un descenso de un 39% en el impagado del ejercicio 2007, lo que supone una disminución de casi 2,5 millones de euros respeto 2006.
Asimesmo, el Concello de Pontevedra recaudou al largo del año pasado casi 2,5 millones de euros en la fase ejecutiva, dentro de los cuales se encuentra el pago de más de 23.000 recibos. Estos datos también anuncian al adelanto del pagado de los impuestos de los pontevedreses en la fase voluntaria.
