PONTEVEDRA. La Policía Nacional escoltó en la mañana de ayer hasta su domicilio a G.S.M., el vecino de Pontevedra de 46 años detenido el miércoles por, supuestamente, haber arrojado a su pareja sentimental por la ventana de un segundo piso en la calle Víctor Said Armesto. Los agentes, que estuvieron en el inmueble recogiendo huellas y buscando diversas pruebas, le instaron a reconstruir la fuerte discusión que terminó con la mujer ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Montecelo por fracturas en la mandíbula y los brazos, de cara a lograr esclarecer si el hombre la empujó o si, como sostiene el arrestado, fue ella misma la que se arrojó.
Aunque estaba previsto que el arrestado pasase a disposición judicial en el día de ayer, la realización de estas diligencias motivó que su estancia en el calabozo de la Comandancia Provincial se haya prolongado durante una jornada más. Además, en paralelo a la reconstrucción de la pelea en base a la versión aportada por el hombre, la Policía Nacional también se desplazó hasta el Hospital Montecelo para tomar declaración a la mujer que apareció herida y tirada en la calle Víctor Said Armesto (en las inmediaciones de la Plaza de Toros).
La pareja del detenido, de 35 años, sigue ingresada en la UCI con pronóstico menos grave (por lo que no se teme por su vida), sin que se hayan producido cambios significativos en su estado de salud. En su entrevista con los agentes de la Policía Nacional, se ratificó en la misma versión de los hechos que había ofrecido instantes después del incidente, cuando la encontraron gritando y pidiendo auxilio en plena calle, es decir, que su novio la arrojó por la ventana de su vivienda durante una discusión.
Tras estas indagaciones (destinadas a completar el atestado policial) está previsto que G.S.M., arrestado por la supuesta comisión de un delito de violencia de género, pase a disposición judicial en el transcurso de esta mañana. La magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de Pontevedra, especializado en Violencia sobre la Mujer, será el encargado de llevar el caso.
Gritos
Los hechos investigados sucedieron en la madrugada del martes al miércoles, con una riña doméstica iniciada en el número 7 de calle Said Armesto alrededor de las 5.00 horas, cuando algunos vecinos aseguran que se sintieron los primeros gritos. Al parecer, la disputa se fue acalorando hasta que todo el vecindario vio interrumpido su sueño por un fuerte golpe de una caída y unos alaridos de dolor y auxilio de una mujer procedentes de la calle.
En torno a las 6.00 horas, varias llamadas de inquilinos de edificios próximos alertaron a la Policía Nacional de lo que estaba sucediendo. Al llegar, los agentes se encontraron a la mujer herida y tirada en la calzada, por lo que solicitaron la presencia de una ambulancia que la trasladó al Hospital Montecelo.
El hombre detenido, que se negó en un primer momento a abrir la puerta a los agentes, tiene antecedentes policiales, si bien no están vinculados con violencia de género. Todos los vecinos de la zona donde acaeció el suceso confirman que este tipo de riñas era frecuente entre la pareja y, a pesar de que no constaban denuncias previas, la Policía ya había recibido en una ocasión una llamada por una supuesta paliza que el hombre le propinó a su novia.
