El pontevedrés acusado de violar a su hijastra durante siete años asegura que la menor miente por celos

El pontevedrés Francisco Javier O.C., denunciado por su hijastra por violación y abusos sexuales continuados desde que la menor tenía ocho años, se declaró inocente durante el juicio que se celebró esta mañana en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra y se defendió asegurando que la joven, que actualmente tiene 17 años, miente por los celos que según explicó sentía la menor desde que él inició una relación sentimental con su madre.

El acusado, de 36 años, aseguró que la denuncia "son inventos" de la joven, a quien calificó de "mentirosa y muy problemática", ya que afirmó que desde que comenzó a salir con su madre, cuando la niña tenía ocho años, "ella sentía que le arrebataba la atención de su madre y, por eso, las relaciones que había eran muy malas", un estado que según el padrastro de la menor ocasionó también numerosos episodios de conflicto escolar.

Sin embargo, la joven, que quiso que su declaración fuera a puerta abierta y protegida por un biombo para no tener contacto visual con su supuesto agresor, insistió en que entre los 8 y los 15 años, el acusado la obligaba a mantener relaciones sexuales completas "hasta cuatro veces a la semana", a lo que ella accedía porque su padrastro la amenazaba con hacer daño a su hermano y a su madre.

Según trascendió en el juicio, estas agresiones sexuales se hicieron públicas después de que la joven explicara por carta a una amiga una de estas supuestas violaciones, una misiva que fue interceptada por la madre de esta compañera. Ella fue quien le comunicó a la madre de la víctima lo que estaba ocurriendo, tras lo cual se presentó una denuncia ante la Guardia Civil de Pontevedra.

Durante la vista oral, los médicos forenses que analizaron a la joven tras la denuncia aseguraron que su relato resultaba "altamente creíble", especialmente porque indicaron que "si fuera una falsa imputación las pruebas que se le realizaron lo revelarían", y señalaron que la menor sufre un notable daño psíquico por estos sucesos, cuyas secuelas aseguraron "están aún por desarrollar y aflorarán cuando tenga una pareja e hijos".

Fiscalía solicita para Francisco Javier O.C. una pena de 15 años de prisión por un delito continuado de agresión sexual, además de una indemnización de 30.000 euros por el daño moral causado a la menor.

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