PONTEVEDRA. La constructora Indeza Edificación y Obra Civil S.L. tiene vía libre para aplicar un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE). La medida será temporal y afectará a toda la plantilla hasta finales del presente año. Así lo confirmaron ayer fuentes consultadas por este periódico, que apuntan que la dirección de la compañía ha justificado la regulación en causas económicas y productivas.
El desplome de la obra pública, la deuda de las administraciones y la fuerte recesión del sector del ladrillo han lastrado las constructoras pontevedresas, en general, y de Indeza, en particular. La plantilla de la firma fundada por Ángel Fernández Presas se ha diezmado en los últimos años. Los despidos, que se iniciaron en 2009, continuaron a lo largo de 2012. En abril del año pasado, la compañía presentó un ERE de extinción que afectó a 13 empleados y otro de suspensión de contratos para tres trabajadores. La plantilla actual de la firma, que asume "pequeñas obras", está formada por once empleados.
Indeza fue la primera constructora gallega en esquivar un concurso de acreedores. Lo hizo en octubre de 2010, fecha en la que el Juzgado de lo Mercantil número dos de Pontevedra daba el visto bueno al convenio firmado entre la empresa y sus acreedores, a los que adeudaba 13,5 millones de euros que se comprometió a liquidar en un plazo de tres años.
La firma pontevedresa no satisfizo el segundo de los pagos comprometidos en tiempo y forma. En la actualidad se desconoce si la compañía podrá hacer frente a las deudas contraídas con Seguridad Social, Hacienda, entidades financieras y proveedores.
La construcción se ha convertido en el sector con menos afectados por Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) en la provincia de Pontevedra. Así lo revela la última estadística publicada por la Consellería de Traballo, que revela que durante el primer trimestre de 2013, el número de trabajadores afectados por un ERE en el ámbito del ladrillo fueron 129. Es decir, el 3,4 por ciento del total. Este ranking de afectados por expedientes de regulación lo encabeza la industria (2.472), seguido de los servicios (954) y la pesca (158).
Entre enero y marzo del presente ejercicio, en las Rías Baixas se contabilizaron 337 ERE, cerca de la mitad de los que se registraron a nivel autonómico. La mayor parte de estas regulaciones fueron de suspensión de contratos (181), seguidas de las de reducción de jornada (145), que se incrementaron un 30,6 por ciento respecto a 2012, y de extinción (once).
El desplome de la obra pública y la fuerte recesión del sector de ladrillo lastran la actividad de las constructoras pontevedresas
