La grúa municipal retira en seis meses 2.670 vehículos

En lo que va de año, la grúa conveniada con el Concello ha retirado 2.670 vehículos de la vía pública, una cifra nada desdeñable, pero que sigue la tónica de otros años. Por mucho que hayan subido las multas de tráfico, los pontevedreses siguen teniendo los mismos hábitos al volante.

Ya sea por compras, recados urgentes o el mero pasotismo de las señales de tráfico, buena parte de los pilotos de la ciudad del Lérez continúan dejando su coche a su antojo. No todos los casos en los que hay infracción conllevan la retirada por parte de la grúa, que lleva en activo en Pontevedra desde 1990. Pero sí una gran parte, que coinciden con los penados por la Ley de la Seguridad Vial.

Entre ellos, el que encabeza el ranking de enganches sigue siendo la ocupación de plazas reservadas para servicios, carga y descarga. Y, según los datos facilitados ayer por la Policía Local, lo hace con una enorme ventaja frente al resto de supuestos, ya que en los primeros seis meses de 2011 ha propiciado la retirada de 1.108 vehículos, el 41,5% de los enganches totales.

Dicho porcentaje muestra una clara preferencia de los pontevedreses por desafiar los 15 minutos establecidos para la carga y descarga y, siguiendo la evolución del modelo urbano, todo apunta a que puede verse incrementado. Al menos, el Plan de Tráfico contratado por el Concello recomienda incrementar este tipo de plazas para acabar con la posesión gratuita de la que disfrutan los vecinos más sedentarios.

Lugares prohibidos

El segundo puesto del podio de enganches es para los aparcamientos en lugares prohibidos, que en la mayor parte se concentran en el centro histórico. La falta de plazas de estacionamiento sobre su superficie han empujado a cientos de conductores a dejar su vehículo mal aparcado, de los que 307 han sido pillados ‘in fraganti’.

El tercer motivo responde a la ocupación de vados, ya que, entre enero y agosto, 185 pilotos han estacionado las cuatro ruedas delante de garajes particulares o locales comerciales, alcanzando el 6,9% del total.

El cuarto es, por su parte, para la obstaculización de la circulación, para coches que invaden calzadas, aceras u otro tipo de espacios reservados para el tráfico rodado o peatonal. En total, la Policía Local ha contabilizado desde enero 141 supuestos que responden a este perfil.

Inmovilizados

Por carecer de permiso de conducir o seguro, presentar daños graves en el vehículo que constituyan un riesgo grave para la seguridad vial o dar positivo en las pruebas de alcoholemia, otros 118 vehículos fueron retirados por la grúa.

Todos ellos (que ocupan el quinto puesto con un 4,1% del total) compartieron el hecho de haber sido previamente inmovilizados, en función de los supuestos que fija la ley. Esta obliga a cepar el coche en los casos señalados y otros tantos, como de aquellos automóviles que superen los niveles de gases, humos y ruido permitidos, que lleven en su interior un número de pasajeros que suponga aumentar en un 50% las plazas autorizadas o que estén dotados de mecanismos encaminados a eludir la vigilancia de los Agentes de Tráfico o de los temidos radares.

Multas

La sexta y última causa que propició el enganche en lo que va de año fue la ocupación de alguna de las 124 plazas habilitadas para discapacitados sin colocar el distintivo que lo autoriza. Esta causó 108 retiradas de vehículos al depósito municipal, lo que supone el 4% del global.

A criterio de los afectados, sigue siendo una cuantía inadmisible, pero lo cierto es que ha bajado en más de un 60% respecto al año pasado. Y es que, en el mismo periodo de 2010, fueron 319 las personas que no respetaron este tipo de plazas y que desembolsaron 285 euros por tal motivo.

De este último importe, 85 corresponden al servicio de grúa, que sigue manteniendo sus tarifas, pese al incremento de las multas de tráfico aprobado en mayo.

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