La Guardia Civil ensayará varios cortes de tráfico en el nudo de O Pino antes de iniciar las obras

La Guardia Civil hará un ensayo general durante estos días con motivo la próxima semana del corte al tráfico del carril de la PO-10 que accede al nudo de O Pino en previsión del atasco que se va a formar, según anunció hoy el subdelegado del Gobierno, Delfín Fernández.

"Se harán cortes de tráfico puntuales en determinados momentos del día y durante algún tiempo para ver qué tal funciona", afirmó Delfín Fernández. "Las consecuencias serán muy importantes para el tráfico. La situación es bastante compleja", añadió.

El motivo de este corte es la construcción de un ramal directo desde la PO-10 hasta la carretera de Vigo que "aliviará notablemente el tráfico en el nudo Sur de Pontevedra", comentó el subdelegado.

Está previsto que estos trabajos se prolonguen entre 6 y 8 meses, dependiendo de lo que se tarde en resolver la expropiación de cuatro viviendas.

Según los últimos datos facilitados por el Ayuntamiento de Pontevedra, por el nudo de O Pino confluyen cada día unos 55.000 vehículos, por lo que hoy se han reunido las administraciones afectadas por la reforma de este enlace para elaborar un plan especial de tráfico mientras duren las obras, es decir, hasta los primeros meses de 2012.

El encuentro, estuvo presidido por el subdelegado del Gobierno y contó con la participación de representantes del Ayuntamiento y de mandos de la Guardia Civil y de la Policía Local de Pontevedra, así como el director de Obras del Ministerio de Fomento y el director de obra de la empresa adjudicataria, Obras, Caminos y Asfaltos S.A.

CINCO FASES

La reforma del nudo de O Pino se acometerá en cinco fases, a lo largo de las cuales se irán ajustando las distintas afecciones al tráfico, pero "siempre teniendo en cuenta que ésta es una obra viva", apuntó el subdelegado, quien pidió "paciencia y comprensión" a los conductores.

Los trabajos consisten en un nuevo enlace tipo diamante, con una nueva estructura, con dos glorietas inferiores. Se reformarán, además, los puentes sobre los ríos Pintos y Tomeza y sobre la línea de ferrocarril de A Coruña-Vigo.

Estas glorietas estarán situadas sobre la carretera N-550 y la conexión entre las mismas se realizará mediante una vía con calzadas separadas y doble carril por cada sentido.

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