PONTEVEDRA. La Once ha formalizado su renuncia a construir un nuevo centro de recursos educativos en A Eiriña, un servicio que pretendía dar respuesta a las necesidades de personas con discapacidad visual en todo el Norte peninsular. A pesar de que contaba con todos los permisos necesarios para su puesta en marcha, la institución ha reclamado la suspensión de la licencia para la edificación de esta instalación en base a dos motivos: la imposibilidad de encontrar una empresa interesada en ejecutar un proyecto presupuestado en más de 3,4 millones de euros y la negativa al pago de las tasas exigidas por los servicios de recaudación municipal.
El Concello reclamó a la Once el abono de 83.000 euros en concepto del Imposto sobre Construcións, Instalacións e Obras (ICIO), una cantidad que la organización asegura que no debe satisfacer hasta que no se inicien los trabajos. «Dado que el Ayuntamiento ha instado al pago de dicha cantidad por vía de apremio, la Once ha solicitado formalmente la suspensión de licencia de construcción con la única intención de evitar estos extremos», afirmaron fuentes de la institución a este periódico.
La Once sostiene, sin embargo, que sigue teniendo «el máximo interés» en mantener el convenio que en verano de 2006 firmó con el Concello y la Xunta para construir el nuevo centro educativo, poner en marcha una residencia de estudiantes universitarios en el colegio Santiago Apóstol (que sería cedida al Gobierno local), un aparcamiento público y la apertura de un nuevo vial en Campolongo, entre la calle Luis Braille y el lugar de San Blas.
El concejal de Urbanismo, Antón Louro, abrió ayer la puerta a la rescisión del acuerdo alcanzado con la Once tras su renuncia al proyecto que mañana se analizará en una comisión municipal extraordinaria. «Aquí hai dúas posibilidades. Ou armarse de paciencia ou romper o convenio», apuntó el edil, que recordó que si se apostase por esta última vía habría que anular la modificación que en su día se realizó al plan urbanístico municipal (PGOU).
Informe jurídico
Louro, que también da por perdida la urbanización de la parcela situada entre las calles Luis Braille, Santa Lucía y Camiño das Abilleiras, pidió ayer «cautela e prudencia» al PP. Los ‘populares’, que denunciaron la paralización de los proyectos de la Once, pedirán al bipartito un informe jurídico que detalle la situación en la que queda el convenio tras la renuncia de la institución a construir su centro educativo.
Responsables del Gobierno local y la Once podrían mantener nuevos encuentros para tratar de «flexibilizar» este acuerdo, ya que, según la organización, «seguimos teniendo el máximo interés en llevar adelante el convenio».
