La plantilla de Construcciones Crespo convocará una huelga en respuesta a la decisión unilateral de la empresa de entrar en concurso de acreedores y acudir a la liquidación. Los operarios no acudirán a sus puestos de trabajo las mañanas de cuatro miércoles consecutivos, según el acuerdo que adoptaron en la asamblea que celebraron a última hora de hoy en el edificio sindical de la calle Pasantería.
Los trabajadores decidieron efectuar la medida de presión (que representa un total de dos días de paro) propuesta por el comité de empresa. En todo caso, no se concretó el día del inicio de la actuación reivindicativa porque «dependerá de como evolucionen os trámites no Xulgado do Mercantil», explicó el representante de la CIG, Xaquín Agulla, que participó en la reunión.
Además, los obreros de Crespo afectados por el expediente de regulación temporal de empleo se concentrarán el próximo lunes, día 12, delante de la sede de la empresa, situada en el número 45 de la Rúa do Gorgullón, donde desplegarán una pancarta.
Según los trabajadores, la decisión de la constructora de liquidar la empresa «é tan precipitada como premeditada» porque «non ten en conta o criterio nin a opinión dos empregados, que son os principales afectados». Además, entienden que la firma tenía tomada la decisión de echar el cierre «desde hai moito tempo» y que «por iso entraron en concurso de acreedores, cun total desprezo da plantilla que non estamos dispostos a consentir».
Los operarios también creen que las deudas contraidas por la empresa con las entidades bancarias «son perfectamente asumibles, porque son mínimas» y, además, «hai moita obra por executar». Según argumentaron, la constructora declaró recientemente un superávit de medio millón de euros y tiene obra programada por un valor de tres millones.
La liquidación de Construcciones Crespo dejaría en la calle a 90 obreros con contrato de carácter fijo indefinido, con una media de edad que supera los 45 años y cuya antigüedad en la empresa se sitúa entre los 25 y los 30 años.
