La Xunta concluirá en dos años la variante de Marín, con 34 M€ de inversión

Las autoridades, durante la presentación.
photo_camera Las autoridades, durante la presentación.

La Xunta de Galicia concluirá en dos años la variante de Marín, que supondrá una inversión de 34 millones de euros y que se convertirá en una de las vías de altas prestaciones que resolverá los problemas de tráfico entre Pontevedra, Marín y el Morrazo.

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, acompañado de la conselleira de Política Territorial, María José Caride, pusieron esta mañana la primera piedra de esta obra, que tendrá una extensión de 4,4 kilómetros, desde O Regueiriño, en Marín, hasta Mollabao, en Pontevedra.

Tal y como explicó la propia María José Caride, el vial garantizará el enlace con la autopista, por lo que se incluirá una remodelación del nudo que existe en la actualidad entre las carreteras PO-11, en el acceso al puerto de Marín desde la AP-9 y la PO-12.

El trecho final de la Variante de Marín es una vía de nuevo trazado que discurre por los términos municipales de Marín y Pontevedra, y contará con una plataforma de 12 metros de ancho compuesta por dos carriles de 3,5 metros cada uno, aunque en la mayor parte de su recorrido incorporará también un carril adicional para vehículos lentos.

Asimismo, también contará con aceras de dos metros y medio, tres viaductos, un paso superior y tres inferiores.

Tanto el presidente de la Xunta como la propia conselleira de Política Territorial coincidieron en la importancia de este vial que dará servicio a una zona de gran afluencia turística y de mucha actividad económica y portuaria y que en la actualidad circulan por la carretera autonómica entre Marín y Pontevedra.

"Esta nueva vía evitará el paso de los vehículos por el núcleo urbano de Marín, por lo que repercutirá tanto en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos de la villa como en la mejora de la seguridad viaria de los conductores y peatones", subrayó Caride ante las autoridades presentes en este acto.

Esta nueva infraestructura, calificada por el máximo mandatario de la Xunta como "de alta prestaciones", se configura, según Touriño, "como un eje que, además de dar servicio a los tráficos entre Pontevedra y Marín mejorará notablemente las comunicaciones del municipio de Bueu y por tanto del Morrazo".

Por otra parte, algunos vecinos contrarios a la ejecución este vial que lo consideran "peligroso" dadas sus fuertes pendientes "de hasta el 6 y 7%" y sus "excesivos tramos de línea continua", se concentraron en las inmediaciones del acto como medida de protesta.

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