Los agentes de la Policía Local, en ciertas ocasiones, y los miembros del Grupo Operativo de Tráfico Medio de la Comisaría Provincial de Pontevedra, en la mayor parte de los casos, son los encargados de lidiar con el último eslabón en la cadena del oscuro mundo de las drogas: los camellos de poca monta y el consumidor final. Pero las sustancias estupefacientes recorren un largo camino desde el lugar en el que se producen hasta su destino final, ya sea en un piso franco, en el poblado de O Vao o en el lujoso chalé de algún comprador pudiente. La cocaína sigue siendo el 'producto estrella', y Pontevedra mantiene el dudoso honor de ser una de las vías de entrada directa de la reina de las drogas, 'usurpando' un trono que décadas atrás pertenecía a la heroína.
La cocaína llega a Pontevedra desde Sudamérica. Los cárteles mexicanos dominan con puño de hierro a los tres grandes productores, Colombia, Perú y Bolivia. Los narcos de estos tres países se las ingenian para contactar con sus homólogos en Pontevedra para, a través del Atlántico, alijar la droga sin ser descubiertos. Los contenedores es la fórmula que emplean de una forma mayoritaria en los últimos meses (diversifican el riesgo y dificultan hasta el extremo la investigación), aunque de cuando en vez se detecten casos de veleros cargados de fardos. Estos ejemplos que recuerdan otrso tiempos, sin embargo, se han desplazado al Norte (Costa da Morte) y al Sur (Portugal), debido a la estrecha vigilancia de las autoridades policiales en las Rías Baixas.
La UDYCO, con sus grupos GRECO, de la Policía Nacional, y el ECO, el EDOA y la Policía Judicial, de la Guardia Civil, defienden, en coordinación con el Servicio de Vigilancia Aduanera y la Fiscalía Antidroga a la provincia de los constantes intentos de los narcos por introducir las sustancias en Pontevedra.
El fiscal especializado en la cuestión, Luis Uriarte, explica que ''tenemos unas magníficas policías que abordan el problema en su integridad, de tal modo que hay cuerpos policiales que están persiguiendo a las grandes mafias internacionales, a los grupos un poco inferiores y al trapichero que está en la calle. Esto quiere decir que no se va a por el camellito que trapichea, se va a por todos los estratos que están favoreciendo el tráfico de drogas. Uno de ellos es el camellito, y se va a por él, pero se investigan a las grandes mafias internacionales''.
La ruta africana de las drogas ha ganado enteros en los últimos tiempos, bien como 'puente' entre América y Europa para el tráfico de cocaína, bien como suministrador directo de hachís. Esta droga, la 'mejor vista' por la sociedad, por su implantación, llega a Pontevedra desde Marruecos, vía Cádiz y Huelva. Su transporte, habitualmente por carretera, está muy vigilado. Pese a ello, en los últimos meses han detectado la presencia de gallegos en Andalucía, muchos de ellos de forma casi perenne, dedicados al transporte de hachís hacia la Península.
''Se ve gente que sigue viviendo aquí (en Pontevedra) y está 'trabajando' en el Sur de España. Primero, porque el tráfico de hachís es por el Sur de España. Segundo, porque los gallegos son expertos marineros, y están siendo contratados para ir a tripular lanchas y meter hachís desde Marruecos. Y tercero, porque en Galicia sigue habiendo grupos que mantienen los contactos, y cuando se busca a alguien no es fácil encontrar a alguien de aquí. Hay varios procedimientos que han reventado últimamente en los que se ha incautado droga a gente de aquí que bajaban, puros lancheros, detenidos en el Sur de España, o gente que estaba subiendo la droga con el coche'', apunta Luis Uriarte, fiscal antidroga de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
El 'caballo' sigue ahí
La heroína, la droga que dominó durante los años 80 y principios de los 90, parecía cerca de su erradicación en los últimos tiempos. Esa percepción había calado también al actual responsable de la Fiscalía Atidroga, que ha tenido que cambiar de opinión cuando, tras llegar a su puesto, tuvo conocimiento de los datos de incautaciones a los que ahora tiene acceso. El 'caballo' ya no es lo que era, eso es cierto, pero su tráfico y su consumo siguen siendo un problema en Pontevedra. Esta droga llega desde Europa a través de distintas vías, con ciudadanos portugueses y personas de etnia gitana detrás de los hechos en la mayoría de las ocasiones.
''Me hice cargo de la delegación antidroga en Pontevedra en mayo-junio de 2010, llevo poco tiempo. Antes de esa fecha pensaba que la heroína estaba superada, y recordaba las campañas con la gente que vimos en la década de los 90 con problemas con esta droga. Por eso me sorprendió el empezar a ver que se traficaba con heroína, que se sigue traficando. No tiene la importancia del hachís y la cocaína, pero sí tiene importancia. Sí hablamos de kilos de heroína. La heroína viene de Portugal y de Europa. Así como la coca viene de América, el hachís viene del Sur, la heroína que yo he podido ver aquí entra por Portugal o por distintas vías de Europa'', puntualiza Uriarte.
