El comité de huelga de los jueces y magistrados de Pontevedra constituido para organizar la protesta prevista para mañana se reunió ayer en el Salón Noble de la Audiencia Provincial con otros magistrados de la provincia para fijar los servicios mínimos del paro y ultimar los detalles del parón.
Los jueces garantizan que durante la jornada de paro «estará garantizada la tutela judicial efectiva», si bien sólo se atenderán los casos más urgentes como los de violencia de doméstica y menoers o los de tramitación preferente. Mantendrán su trabajo los integrantes de las juntas electorales.
El juez decano, Fidel del Río, señaló que el sector calcula que la convocatoria será seguida por alrededor del 60 o 70 por ciento de los profesionales de la provincia, y que serán ciudades como Pontevedra y Vigo y pueblos como Cambados u O Porriño los lugares en los que más afectará.
El juez decano reconoció que la huelga afectará a los ciudadanos, pero recordó «que es una protesta más para ellos que para nosotros que quiere mejorar el servicio que les damos» y aseguró que «les perjudicará la mitad que la que hacen los pilotos de Iberia».
Los secretarios judiciales se sumaron ayer a las críticas al sistema y mostraron su compromiso con la «imprescindible modernización de la Administración de Justicia que el ciudadano demanda». Los profesionales celebraron una asamblea en la que concluyeron por unanimidad exigir «la urgente implantación de la nueva Oficina Judicial» y denunciar la «manifiesta insuficiencia de medios personales y materiales»
Tras criticar la «absoluta falta de coordinación e integración de los actuales sistemas informáticos, imprescindibles para prestar un servicio público de justicia de calidad», los secretarios manifestaron que «de acuerdo con nuestras responsabilidades, no consentiremos más discriminaciones en nuestras condiciones laborales en relación con el resto de profesionales de la Administración de Justicia».
