PONTEVEDRA. El producto estrella de la Navidad, el marisco, sigue subiendo sus precios de venta en el Mercado de Abastos pontevedrés, ya que especies tan demandadas como la nécora, la cigala y la centolla empiezan a escasear en las lonjas. Al mismo tiempo, pescados como el bacalao (típico en la cena de Nochebuena) y carnes como cordero, que muchos pontevedreses eligen para el día 25, se mantienen estables, por lo que su demanda ha aumentado en los últimos días.
A pesar de la subida generalizada del marisco, algunas especies han bajado de precio de forma notable porque el interés de los compradores ha disminuido. Es el caso de las almejas y los mejillones: estos últimos podían encontrarse ayer por dos euros, en claro contraste con el rey de las subidas navideñas: el camarón. Ayer por la mañana, los consumidores podían encontrarlo por un precio que oscilaba entre los 25 y los 130 euros por kilo. A pesar de ello, esta especie ha registrado una importante bajada con respecto al año pasado, cuando llegó a costar 180 euros.
Última hora
A la hora de adquirir los alimentos necesarios para los menús navideños, hay dos tipos claros de consumidores: los que compran con mucha antelación y los congelan, y los que esperan a última hora. El objetivo es el mismo: encontrar los precios más ajustados. Por este motivo, el Mercado pontevedrés no mostraba ayer toda la actividad esperada, a pesar de que solo faltan tres días para que llegue Nochebuena. Algunos de los clientes ni siquiera pensaban en las próximas fechas festivas. «No veníamos buscando nada para esos días, no está la cosa para gastarse 50 euros en un kilo de marisco», dice María Rosario Gómez, que acude a la Plaza en compañía de su hija para conseguir productos que cocinará al llegar a casa. «Yo para Navidad compro congelados, que me salen muy bien. No se nota tanto la diferencia con los productos frescos. Ya tengo algunas cosas de hace tiempo».
Lonjas
Los placeros también notan el ligero descenso en las ventas, aunque prevén que la demanda aumente a última hora. «Siempre hay quien quiere el producto fresco», señala la presidenta de Amapo, Manuela Domínguez, que recuerda que el lunes la Plaza tendrá la actividad de cualquier otro día porque «funcionan las lonjas de Marín, Vigo, Portonovo, Cambados... (lo habitual es que el primer día de la semana esté abierto solo el de la ciudad olívica). Una de las personas que se apuntan a las ofertas del último momento es Maricarmen Cochón, que afirma que todavía no ha comprado ningún producto de cara a Nochebuena y que acaba de comprar bacalao simplemente porque «estaba muy bien de precio». «Hasta el lunes no vendré, o incluso hasta el martes. Cuando vean que no venden todo lo que tienen ya bajarán los precios», manifiesta.
Mientras que la demanda de los productos típicos sigue al alza, los vendedores notan que el resto de alimentos que pueden encontrarse en la Plaza pontevedresa no logran despertar el mismo interés que en otros momentos del año. «Es difícil conseguir que vengan a por pescados normales, fuera de las personas mayores que ya tienen eso como tradición. Los jóvenes compran marisco congelado y se olvidan de otras especies», contaba ayer un placero. Pese a todo, siempre hay quien busca todo tipo de comida. «Yo acabo de comprar fruta, verdura, miel, merluza... pensaba que estaría mucho más cara. La verdad es que en el Mercado encuentro de todo», contaba ayer Margarita Ortega.
