PONTEVEDRA. Los vecinos de los edificios de la Unidade de Actuación 18 llevan semanas trasladando su malestar al Concello por el uso que muchos conductores dan a las parcelas recientemente urbanizadas. Los propios vecinos reconocen que sintieron una gran satisfacción cuando vieron que tras muchos años de abandono, en el que las zarzas cubrían las viejas edificaciones, se procedió a la urbanización de la zona.
Sin embargo, apuntan que esa alegría inicial se ha ido transformando en preocupación a medida que las parcelas han sido ocupadas de forma indiscriminada como aparcamiento. Ante la falta de estacionamientos gratuitos en el centro de la ciudad los conductores han visto en estas parcelas una vía alternativa a los parking y a los estacionamientos disuasorios de Mollavao y el Pazo da Cultura, con la ventaja de que estacionar en estas parcelas es gratuito y céntrico. La Unidade de Actuación 18 da acceso a Eduardo Pondal, Joaquín Costa y Doce de Novembro y, con la puesta en marcha del nuevo vial, a los juzgados de A Parda.
Los residentes en los edificios colindantes a estas parcelas han expresado en numerosas ocasiones su malestar al Concello porque el paso continuo de los coches está destrozando las aceras y las arquetas, ya que la única forma de acceder a los solares para estacionar es utilizar los desniveles habilitados en los pasos de peatones. La situación empeora los días de lluvia, según explican los vecinos porque se forma lodo en la tierra de las parcelas y, una vez los coches abandonan el lugar en el que estaban aparcados, dejan un rastro en la acera. Además denuncian que muchos ‘gorrillas’ se dan cita cada día en la zona y generan situaciones poco deseables como trapicheos o discusiones entre ellos.
(Más información en nuestra edición impresa del viernes, 30 de septiembre)
