Maximino Couto pide ayuda a Fiscalía para poder conciliar el sueño en prisión

Maximino Couto, el día de su detención
photo_camera Maximino Couto, el día de su detención

Maximino Couto Durán ha tenido que pedir ayuda al Juzgado y a la Fiscalía para poder conciliar el sueño con normalidad en prisión y poder dormir durante toda la noche por primera vez desde que volvió a ingresar en la cárcel de A Lama, el lunes 1 de diciembre, después de confesar haber matado a su novia y herido a un matrimonio y un policía nacional.

La causa de su insomnio no está relacionada con los hechos que protagonizó en Tourón (Ponte Caldelas) y Mourente, sino con una enfermedad que le diagnosticaron hace ya bastante tiempo: la apnea del sueño, un desorden amenazador del descanso nocturno caracterizado por pausas frecuentes en la respiración.

El mismo facultativo que le diagnosticó la enfermedad le recetó una máquina contra la apnea del sueño que Maximino Couto tenía en prisión y llevó a la casa de Rosario Peso André, su futura víctima, cuando el martes 25 de noviembre le concedieron un permiso penitenciario de tres días.

Tras el asesinato de su pareja y el sangriento recorrido que realizó por Mourente en busca de su ex mujer, Maximino Couto fue detenido, trasladado a la Comisaría Provincial de la Policía Nacional y, desde allí, regresó a A Lama por un delito de homicidio consumado (contra su pareja), dos de tentativa de homicidio (contra su ex mujer y su vecina Concepción C.A) y, al menos, dos de lesiones (a su vecino José P.P. y el policía nacional P.B.G.), pero volvió a prisión sin la máquina que necesita para dormir.

Desde que el 1 de diciembre, hace ya once días, Maximino Couto regresó a A Lama no ha podido dormir con normalidad, de ahí que haya decidido enviar una instancia al Juzgado de Instrucción número 3 de Pontevedra, al que ha sido asignado su caso, y a la Fiscalía solicitando que le sea remitida a la prisión la máquina.

La fiscal especializada en violencia sobre la mujer, Carmen Novo, informó favorablemente al juzgado para que el homicida confeso pueda seguir el tratamiento en prisión, pero la decisión está ahora en manos de la jueza, según informaron fuentes judiciales.

Por otra parte, fuentes penitenciarias señalaron que, a pesar de sus dificultades para dormir, Couto Durán se encuentra tranquilo en la prisión y, aunque lamenta haber causado la muerte de su pareja, no está arrepentido por las agresiones de Mourente.

Comentarios