Obtienen de un mismo árbol frutal naranjas, mandarinas y pomelos

Àrbol en una huerta de Moldes que tiene tres clases de frutos cítricos. dp
photo_camera Àrbol en una huerta de Moldes que tiene tres clases de frutos cítricos. dp

PONTEVEDRA. Tres variedades de cítricos en el mismo árbol. José Outeda puede presumir de tener tres frutos distintos que nacen en un único ejemplar: la mandarina, el pomelo y la naranja.

En su huerta, situada en el barrio de Moldes (Mourente), este aficionado a la horticultura se marca como reto sacar del árbol dos nuevas variedades: el limón (trató de conseguirlo en 2012 y en 2013, pero los temporales de viento y lluvia le rompieron los brotes nuevos) y el kumquat, una mandarina enana china que tiene forma de pera y que se come con la piel.

«Me apasionan las cosas raras. De la misma forma que tengo manzanos con tres o cuatro variedades en el mismo árbol, quiero conseguir cítricos con el máximo número posible de variedades», explica Outeda, cuya afición le evita tener que acudir al supermercado para llenar la cesta con distintas clases de frutas.

Añade que «quiero ver hasta cuántas variedades distintas de fruta puedo sacar de un mismo árbol, un objetivo que no comparte mi mujer, que sufre al ver cómo experimento con un naranjo que, aunque es pequeño, produce muchas naranjas».

Pruebas

Outeda explica que está consiguiendo avances con sus experimentos con el naranjo mediante la realización de pruebas con injertos de otros árboles de cítricos, entre ellos el que le regaló Fernando Pedrosa Roldán, ya fallecido, padre del exalcalde de Pontevedra Juan Luis Pedrosa. «Me dio un injerto de la variedad de pomelo gigante de un árbol que tenía en su finca, en el que crecían frutos que pesaban más de dos kilos. Yo conseguí que brotasen pomelos en mi árbol que pesan más de un kilo pero que no alcanzan el tamaño de los que tenía Fernando Pedrosa», precisa.

«Aprendí a injertar a base de intentarlo una y otra vez, unas veces con más acierto que otras, realizando distintas pruebas», destaca Outeda. Anuncia que en cuanto acabe con los cítricos va a intentar aunar en un mismo árbol peras y manzanas.

«Si se eligen variedades que se dan en distintas temporadas del año se puede obtener fruta desde enero hasta diciembre. Un único árbol puede dar fruta para mucho tiempo si se le injertan diferentes variedades», apostilla el propietario de la singular huerta, situada en el núcleo de Moldes.

Para producir cierta cantidad de fruta el árbol necesita crecer durante cinco años, la misma edad que tiene el naranjo multicítrico de cuyas ramas cuelgan pomelos gigantes, mandarinas y naranjas. «Para efectuar los injertos tuve que esperar a que el árbol estuviera fuerte y bien enraizado. Esta actuación no se puede hacer con ejemplares de muchos años, de mucha ramificación, porque la sabia no circula con la fuerza que necesitan los brotes».

Comentarios