PONTEVEDRA. La normativa que regulará el uso del suelo para la construcción de crematorios en Pontevedra se aprobará este mes. El Concello llevará al Pleno del próximo día 28 la modificación puntual de su plan urbanístico (PGOU) con el objetivo de poner en marcha una directriz que solo permitirá la puesta en marcha de este tipo de instalaciones funerarias en suelo rústico, cementerios o polígonos con parcelas reservadas a industrias contaminantes. Los futuros hornos no podrán edificarse a menos de 50 metros de núcleos residenciales o comercios en todo el municipio.
El teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, Antón Louro, se congratuló hoy por la iniciativa que, en la práctica, supondrá el levantamiento de la suspensión de licencias decretado desde diciembre del año pasado y allanará el camino para que Funespaña edifique en San Amaro el primer crematorio de la ciudad. Ninguno de los otros cuatro proyectos presentados cumple la nueva normativa municipal.
El edil socialista recordó que, además de política, la decisión de regular la actividad de estos complejos funerarios ha respetado los criterios de todos los técnicos del Gobierno local. «Este proxecto respectará o interés xeral, veciñal e empresarial. As regras do xogo son imparciais e respectuosas coa lexislación vixente», destacó.
El director xeral de Urbanismo, José Manuel Tato, que acompañó a Louro en la rueda de prensa de hoy, recordó que a partir del próximo 28 de octubre «poderanse presentar solicitudes e dar licenzas sempre e cando se cumpra coa normativa anterior e a que entrará en vigor».
A partir de esta fecha, el Concello expondrá la modificación del PGOU al público durante un período de dos meses, el máximo previsto por ley, «para darlle máis transparencia ó proceso». Trascurrido este plazo, y tras examinar las posibles alegaciones, el Pleno municipal aprobará el texto de forma provisional. Será finalmente la Xunta la que decida si la directriz se ajusta a la normativa urbanística en vigor, un proceso para el que tendrá un plazo máximo de tres meses. En total, los trámites para la aprobación definitiva de las nuevas reglas para la puesta en marcha de crematorios en Pontevedra podrían resolverse en aproximadamente seis meses.
