son varias las generaciones Pedrosa que han nacido y vivido en la ciudad. «Hace años hicimos una reunión de la familia y no recuerdo cuántos nos juntamos, pero éramos bastantes». Ernesto Pedrosa Silva (Pontevedra, 1959) se considera «un pontevedrés de toda la vida», que vivió su infancia y adolescencia a caballo entre la vivienda familiar de Joaquín Costa y el chalé que sus abuelos tenían en A Eiriña.
Tal vez por ese apego al centro, el paseo da comienzo ante el Santuario de A Peregrina y discurre por todos sus aledaños: Michelena, A Ferrería, Soportais, Curros Enríquez... «Los juegos de nuestra infancia no tenían nada que ver con la tecnología actual, obviamente. Lo nuestro era el trompo, el ‘pincho’, el fútbol, mucho deporte...»
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