Un grupo de ciclistas urbanos reclama carriles propios hacia Marín y Lourido

Reunión de la Mesa da Bicicleta, anteayer en el Concello. david freire
photo_camera Reunión de la Mesa da Bicicleta, anteayer en el Concello. david freire

PONTEVEDRA. La promoción del uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo al automóvil sigue siendo prioritaria para muchos pontevedreses. Un grupo de ciclistas urbanos reclamó ayer carriles propios para poder llegar a Marín o a las playas de Lourido desde el centro de la ciudad, una vieja demanda que ha vuelto a poner de actualidad la Mesa da Bicicleta.

El organismo, en el que están representados el Concello y distintos colectivos que promocionan el uso de los vehículos sin motor, se reunió el martes y ayer dio a conocer parte de su calendario de actividades para 2014 y algunas de sus reivindicaciones. Entre ellas figura la de reservar un carril-bici en el puente de A Barca, que une los municipios de Pontevedra y Poio. Creen que este nuevo espacio beneficiaría al comercio local de ambas localidades y reduciría la contaminación asociada al uso del automóvil.

«Agora mesmo a ponte é un perigo para nós, xa que temos que compartir un espazo cos coches e con vehículos de gran tonelaxe», aseguró Quique Pérez en nombre de la asociación Masa Crítica, que cree que es necesario rescatar el proyecto que presentó en su día se para humanizar el viaducto y que, básicamente, consistía en ampliar las actuales aceras y dotar de un carril-bici a la infraestructura, que pasaría a tener un único sentido de circulación.

Miguel Filgueira

El concejal del departamento de Mobilidade Ciclista, Miguel Filgueira, respaldó ayer la petición de la Mesa da Bicicleta, una reivindicación que coincide con la reiterada a finales del mes pasado por el BNG, en la que instaba a la Xunta a reservar una partida de 400.000 euros en los Orzamentos de 2014 para reformar A Barca para ganar espacio para ciclistas y peatones. «Se por nós fose xa estaría feito, pero dependemos doutras administracións, como o Concello de Poio e a Xunta», aseguró el edil, que recordó que el viaducto de As Correntes «fíxose para liberar a ponte da Barca e para que sexa a principal vía de entrada e saída de Pontevedra».

Filgueira negó, por otra parte, que el hecho de retomar el proyecto para construir un carril-bici en el puente de A Barca se utilice para justificar la reordenación del tráfico prevista por el Concello capitalino en los accesos al viaducto y que cuenta con el rechazo del PSOE y el PP. «É só aproveitar polémica para dicir que non todo o mundo está en contra destes cambios. Hai xente que está calada e que apoia a peonalización e a reorganización na Barca», destacó.

La tesis del edil nacionalista la comparten también miembros de Masa Crítica, que temen que la controversia generada por el corte del puente de A Barca eche por tierra la idea de reservar espacios para los ciclistas en la zona. «É algo que levamos reclamando dende hai dous anos (...). E agora temos medo a que o proxecto desapareza», subrayó Quique Pérez.

Policía Local

La Mesa da Bicicleta encara 2014 con varios objetivos, entre los que figura la divulgación de una campaña para ciclistas (‘Faite ver’), a los que se reclamará el uso de las medidas de seguridad oportunas para la circulación, y conductores, a los que se exigirá que cumplan la distancia de seguridad de 1,5 metros con los usuarios de vehículos sin motor.

El colectivo, que reforzará la feria de la bicicleta en A Ferrería y organizará una marcha ciclista (una clásica) desde la capital provincial durante el año que viene, retoma la idea de que la Policía Local cuente con un departamento de patrulla en bicicleta por la ciudad. «É un tema que se está a madurar», dijo Filgueira.

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