Vuelta al cole tras la Navidad con claraboyas y persianas rotas

El falso techo se desprendió a causa de filtraciones de agua en el colegio Campolongo. javier cervera-mercadillo
photo_camera El falso techo se desprendió a causa de filtraciones de agua en el colegio Campolongo. javier cervera-mercadillo

PONTEVEDRA. Los daños del temporal suman nuevas víctimas. Los colegios de Infantil y Primaria volvieron ayer a la actividad con múltiples desperfectos que en la mayor parte de los casos se descubriron al llegar por la mañana a los centros. Los destrozos más evidentes se produjeron en el colegio de Barcelos donde se rompieron varias claraboyas que habrá que sustituir.

El concejal de Educación, Agustín Fernández, recibió los partes de incidencias de algunas escuelas directamente y a través de los servicios de mantenimiento municipales, a los que dio orden de iniciar las valoraciones. Algunos de los centros ya han sido visitados por los técnicos y los daños ya están evaluados y otros se irán viendo en los próximos días.

Según indicó el concejal, los trabajos se realizarán tan pronto como sea posible y, en el caso de reposiciones de tejas y trabajos en altura, cuando el tiempo lo permita.

El colegio de Barcelos fue uno de los más afectados por los sucesivos días de temoral que azotaron la ciudad. Los lucernarios que hay en el edificio acabaron totalmente agujereados, con toda probabilidad a causa del pedrisco caído en la madrugada del 4 de enero. Tienen que ser sustituidos en su totalidad, ya que no hay reparación posible para la cantidad de agujeros existente.

Asimismo, en el centro también entró agua en el gimnasio, que está en el sótano, y también hay rotas algunas tejas y persianas exteriores.

39 persianas

En el colegio de Campolongo, que permaneció abierto durante las vacaciones de Navidad para la celebración de la ludoteca, ya se dio parte de la mayor parte de los desperfectos el pasado lunes a las brigadas municipales.

En total, el director del centro, José Manuel Sánchez Moure, contabilizó 29 persianas de plástico agujereadas, así como otras diez de aluminio aboyadas. También una puerta metálica presenta importantes impactos a causa del granizo.

Los desperfectos que aparecieron ayer también son importantes, pues dos lucernarios están en malas condiciones. Uno de ellos, en la planta baja, apareció en la mañana de ayer totalmente inundado. Aparentemente no presenta ningún agujero, pero filtra el agua «a chorros» desde una canaleta. La otra claraboya está totalmente destrozada por el pedrisco. «Es como si hubiera sido ametrallada», y habrá que sustituirla.

Para evitar problemas de resbalones, la dirección del centro ha puesto alfombras de goma antideslizantes en el suelo, ha indicado que hay peligro en la zona y, en el caso del pasillo inferior, este se ha delimitado con mesas para evitar el paso.

La zona del patio de Campolongo también se vio afectada por el temporal. De hecho, un árbol se partió por la mitad, entre otras daños, sin embargo, todo el recinto estaba ayer a las ocho de la mañana casi en perfecto estado de revista. «Cuando llegaron los alumnos estaba todo recogido en montones. Desde las seis de la mañana los servicios del Concello estuvieron recogiendo todo», aseguró el director del centro, que insistió en que la de Campolongo fue una zona muy castigada por el mal tiempo.

De hecho, durante la jornada de ayer se descubrieron nuevos daños por filtraciones de agua, que hicieron caer el falso techo de la ‘sala de máquinas’ en la que está la fotocopiadora, ordenadores y otro material. Esta se encuentra bajo un tejado de uralita, probablemente agujereado.

Más daños

Crespo Rivas, Froébel y Salcedo

La Concellería de Educación tuvo ayer constancia también de desperfectos en el centro de Educación Infantil Crespo Rivas de Campolongo. Allí la dirección avisó de que un árbol había caído y dañado la verja metálica y el muro del cierre exterior, que probablemente será sustituido.

También constan algunos daños en el colegio Froebel y en el San Martiño (Salcedo), por donde por el momento no han pasado las brigadas municipales y se está a la espera de una valoración. Agustín Hernández no descarta que haya más daños, pero supone que serán menores.

Comentarios