La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha confirmado punto por punto el dictamen elaborado por el Juzgado de lo Penal 1 de A Parda, que condenó a un individuo a una pena de 14 meses de cárcel por un delito de robo con fuerza en las cosas, después de desvalijar la iglesia de San Mauro hace ahora cuatro años, en el mes de agosto de 2017.
Los hechos, según el dictamen, se produjeron cuando el encausado "violentó la puerta metálica del campanario de la capilla de San Mauro", en Mourente, accediendo al interior de la iglesia. Una vez allí, se apropió de un cáliz, una patena y un copón valorados en unos 450 euros. Rompió, además, los candados de los cepillos, si bien no constan las cantidades que contenían en su interior, por lo que no pudieron ser valoradas.
Como principal prueba de lo sucedido, la Policía contó con el ADN del investigado que los especialistas de Científica lograron discriminar en una llave inglesa que se halló en el suelo de la capilla. Esa prueba fue controvertida por el letrado del condenado, pero ni la Fiscalía, ni el juzgado de instancia ni la Audiencia acogieron tal argumentación.
En el juicio, el acusado negó los hechos e indicó que aquel día estaba en Zamora, circunstancia que no logró acreditar.
El condenado aun tiene la opción de presentar un nuevo recurso, ahora ante el Tribunal Supremo.
