El 41% de los pontevedreses tiene dificultades para compaginar su vida laboral y familiar

La situación es más difícil entre los trabajadores del sector privado y los autónomos, mientras en la Administración la cifra se reduce al 31% ▶Este lunes entraron en vigor los permisos de paternidad de ocho semanas, una medida que ayudará a ambos progenitores a compartir la primera etapa de sus bebés y a avanzar en el camino de la corresponsabilidad

Uno de cada cuatro trabajadores pontevedreses disfruta de medidas de conciliación. PIXABAY
photo_camera Uno de cada cuatro trabajadores pontevedreses disfruta de medidas de conciliación. PIXABAY

Reducción de jornada, posibilidad de teletrabajar, flexibilidad horaria, días de libre disposición, permisos para acompañar a familiares a visitas médicas... Son muchas las medidas encaminadas a ayudar a los trabajadores a conciliar su vida laboral y familiar, aunque no todos pueden disfrutar de ellas con las mismas facilidades y no todas las empresas las llevan a la práctica, por no hablar de las diferencias que siguen separando a funcionarios, asalariados del sector privado y autónomos.

En la provincia de Pontevedra, un 40,7% de las personas ocupadas afirma tener dificultades para compaginar su trabajo con el tiempo en familia. Según los datos que maneja el Instituto Galego de Estatística, los que lo tienen más complicado son los empleados del sector privado, los empresarios y los autónomos, pues en esos casos el 40% se queja de que pasa apuros para conciliar, mientras que entre los trabajadores de las administraciones públicas, la cifra desciende hasta el 31%.

Por sectores, los que peor lo llevan son los directores y gerentes (el 46% de los encuestados por el IGE dice que le resulta arduo conciliar), seguidos por operadores de instalaciones y máquinas y por montadores (en estos casos la cifra es del 45%), por los empleados de restauración, ventas y seguridad (41%) y por trabajadores de oficinas como por ejemplo administrativos y contables (el 39%).

El 95% de las personas ocupadas que mantienen una jornada laboral parcial para poder atender a familiares son mujeres

Sea en el sector que sea, el problema de la conciliación se agudiza entre las mujeres, ya que, por lo general, son estas las que siguen llevando la mayor parte del peso de sus hogares. De hecho, según el IGE, el 36,8% de los varones gallegos dice tener problemas para cuadrar sus obligaciones profesionales con las familiares, mientras que en el caso de las mujeres el porcentaje ronda el 40% .

Un estudio realizado en Galicia por Adecco, empresa líder en recursos humanos, señala que la proporción se dispara hasta el 80,7% cuando el colectivo encuestado se centra en trabajadoras con hijos o cargas familiares.

Además, el 95% de quienes mantienen una jornada laboral parcial para poder atender a dependientes son mujeres.

MÁS PERMISO. Con este panorama, la ampliación del permiso de paternidad a ocho semanas que entró en vigor el lunes ayudará a muchas parejas a asumir con más facilidad la dedicación que implican los primeros meses de vida de sus bebés y también a avanzar en el camino de la corresponsabilidad familiar.

Con este objetivo, la ley también va mejorando, aunque paso a paso: en el año 2007 el permiso de paternidad duraba aproximadamente 15 días, en 2017 se extendió hasta las cuatro semanas, en el verano de 2018 aumentó a cinco y a partir de este lunes es de ocho. Si se cumple lo anunciado, en el año 2020 se ampliará hasta 12 semanas y en 2021 a cuatro meses, igualándose así al de maternidad. Una vez equiparados, las seis primeras semanas posteriores al parto serán obligatorias e ininterrumpidas y las diez restantes que tendrá cada progenitor serán a distribuir hasta que el bebé cumpla un año.

Los progenitores que se conviertan en papás del lunes en adelante tendrán la oportunidad de disfrutar de dos semanas ininterrumpidas de permiso tras el parto y otras seis que podrán coger de forma intermitente hasta que el bebé alcance el año de edad

Pero dejando a un lado el futuro y centrándose en la realidad actual, los progenitores que se conviertan en papás del lunes en adelante (los distintos de la madre biológica) tendrán la oportunidad de disfrutar de dos semanas ininterrumpidas de permiso tras el parto y otras seis que podrán coger de forma intermitente (en períodos de al menos una semana) hasta que el bebé alcance el año de edad.

Este permiso, retribuido al 100%, será intransferible, por lo que si el padre no lo disfruta, no lo podrá ceder a la madre.

Así lo dicta el Real Decreto-ley de medidas urgentes para la garantía de la igualdad de trato y oportunidades en el empleo y la ocupación aprobado por el Gobierno recientemente.

Aunque este entró en vigor el lunes, su continuidad dependerá de que sea convalidado por la Diputación Permanente del Congreso (el órgano que funciona al estar disuelta la Cámara). Fuentes del Ministerio de Igualdad precisaron que no se contempla el escenario de que el Parlamento lo tumbe, así que, si nada lo impide, seguirá tal cual.

A pesar de que el Decreto Ley se hizo oficial el pasado 8 de marzo, la extensión de los permisos por paternidad no empezó a aplicarse hasta el lunes. La Moncloa justificó ese retraso aludiendo a la necesidad de conceder un mayor plazo a la Seguridad Social y a las empresas para su adaptación y también a «un error» en el texto a publicar en el Boletín Oficial del Estado, que debía subsanarse.

Lo cierto es que, a causa de esas demoras, los progenitores cuyos hijos naciesen durante el mes de marzo no podrán beneficiarse de la ampliación de las licencias de paternidad, independientemente de que el Real Decreto Ley fuese aprobado el 1 de marzo y publicado en el BOE el día 8.

Uno de cada cuatro trabajadores disfruta de medidas de conciliación

Únicamente el 28% de quienes se acogen a alguna opción en su empresa para compaginar empleo y familia son hombres ▶La posibilidad de teletrabajar solo beneficia al 6% de los empleados

Los permisos de paternidad o maternidad son una de las medidas destinadas a ayudar a los trabajadores a combinar vida laboral y familiar, pero no son la única. De hecho, un cuarto de la población pontevedresa ocupada señala que se ha acogido a alguna de las opciones de conciliación disponibles en sus empresas.

El pasado 23 de marzo se celebró el Día Nacional de la Concliación y la Corresponsabilidad y, con tal motivo, Adecco realizó un estudio en Galicia. Según ese análisis, el 71,7% de las personas que disfrutan de medidas de conciliación son mujeres y solo un 26,2% son hombres.

Lo más grave es que del 75,1% que no se acoge a esas opciones, la mitad dice no hacerlo porque la compañía en la que trabaja no le ofrece ninguna alternativa o solución para poder equilibrar su vida profesional con la personal.

De los que sí lo hacen, la mayoría disfruta sobre todo de flexibilidad horaria a la hora de entrar o salir del puesto de trabajo (38,5%), goza de días de libre disposición o de asuntos propios para temas personales además de las vacaciones (32,7%) y recurre a permisos especiales para acompañar a familiares a visitas médicas (15,1%).

En menor medida, los encuestados gallegos que pueden acogerse a planes de conciliación piden reducción de jornada por maternidad o paternidad (7,8%; siendo el 98,2% de ellos mujeres) o solicitan teletrabajar (5,9%). No obstante, no todo el mundo dispone de todas esas opciones en su empresa y en algunos casos los empleados se acogen sólo a la única medida ofertada.

Preguntando a los trabajadores qué medidas valoran más con respecto a esta materia, lo más apreciado es la flexibilidad horaria (49,7%), seguida por la posibilidad de tener una jornada intensiva (32,2%) y poder teletrabajar (10,6%).

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