El 99,7 % de los conductores se ajustaron al cumplimiento de las nuevas medidas

Solo dos de los más de 600 ciudadanos controlados en los accesos a Pontevedra recibieron propuesta de sanción
Policía Local, en Estribela, controlando el tránsito entre Pontevedra y Marín. GONZALO GARCÍA
photo_camera Policía Local, en Estribela, controlando el tránsito entre Pontevedra y Marín. GONZALO GARCÍA

La primera jornada en la que entran en vigor nuevas restricciones en la presente pandemia suele ser muy activa en cuanto a controles preventivos de vigilancia, y este viernes no fue una excepción. La situación de confinamiento perimetral de manera individual del término municipal de Pontevedra obligó a los distintos cuerpos de seguridad a establecer dispositivos en las principales entradas y salidas del casco urbano con la intención de informar, disuadir y, en último caso, denunciar a quienes pretendiesen incumplir con las nuevas restricciones decretadas por la Xunta de Galicia. El resultado provisional del despliegue resulta esclarecedor, y viene a demostrar que la inmensa mayoría de los ciudadanos se ajustan a los dictámenes, por muy discutibles que sean. Así, de los conductores de los 620 coches que fueron objeto de control e identificación durante la jornada, solo dos resultaron denunciados. El resto, o bien tenían una causa justificada para entrar o para salir de Pontevedra, o bien se dirigían desde un municipio sin restricciones (en este caso, Marín) a otro sin restricciones, haciendo uso del derecho de paso que concede la normativa. Estos datos desvelan que el 99,7 por ciento de los conductores que fueron identificados cumplían con la normativa y apenas un 0,29 % pretendía saltársela.

En cuanto a la ubicación de los dispositivos de vigilancia, las policías locales de Pontevedra y Marín (especialmente la primera, más numerosa) y la Policía Nacional establecieron controles conjuntos, prestando especial atención a los viales que unen los tres municipios que, hasta el jueves, conformaban un perímetro: Pontevedra, Poio y Marín. Los agentes estuvieron en la zona de Paseo de Colón, acceso a la Boa Vila desde Poio, pero también en las inmediaciones de Estribela, zona limítrofe entre el concello marinense y el término municipal de la ciudad del Lérez.

La Policía destaca el excelente grado de cumplimiento por parte de la inmensa mayoría de los vecinos de la comarca

Fuentes de la Policía Local de Pontevedra informaron de que por la mañana fueron inspeccionados unos 150 turismos, y fue en ese espacio temporal cuando detectaron los dos únicos presuntos infractores de la normativa establecida. El lugar, la entrada desde el puente de A Barca.

Ya por la tarde, los funcionarios centraron sus esfuerzos en controlar la entrada de automóviles procedentes de Marín. Los 300 que inspeccionó el cuerpo policial pontevedrés tenían motivo para su desplazamiento o bien presentaban su justificante, lo mismo que los 200 que identificó la Policía Local de Marín.

A estos datos habría que añadir el despliegue efectuado por los efectivos del Subsector de la Guardia Civil de Tráfico. En su caso, su ámbito competencial es mucho mayor (toda el área Norte de la provincia), por lo que las cifras serán recopiladas en los próximos días.

Comentarios