La unión temporal de empresas formada por Extraco y Civis Global suprimirá los tres pasos a nivel de Os Praceres. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha adjudicado la obra que afecta al ramal ferroviario al Puerto de Marín por 9.284.413,49 euros (IVA incluido), lo que supone un 14,13% menos de los más de 10,8 millones de euros presupuestados en la fase de licitación.
La concesionaria se ha impuesto a otras once ofertas y dispondrá de un plazo de 18 meses para ejecutar estos trabajos. El resultado del contrato, cerrado el pasado 31 de enero, fue publicado por el Adif este martes, el mismo día en el que el Tribunal Supremo se reúne para deliberar el futuro de Ence en Lourizán.
El proyecto implicará la construcción de dos túneles. El primero, de 117,25 metros de longitud y de hasta cuatro metros de gálibo vertical, discurriría al Sur de la vía del tren, en paralelo a la Rúa do Areal y de forma perpendicular a la Avenida dos Praceres, lindando con el número 26 de dicha avenida, en donde hay una vivienda. El paso inferior, de dos carriles, uno por cada sentido, ocuparía terrenos empleados actualmente como aparcamiento, entre las canchas de baloncesto y el campo de fútbol.
El segundo túnel, con un carril de ida y otro de vuelta, afectaría a la Rúa Praia. Obligaría a desplazar hacia el Sur la glorieta de Montero Ríos y a reordenar las calles que acceden a esta avenida. El paso inferior, de 169,41 metros de longitud, comenzaría en la nueva rotonda y acabaría en la zona de O Cabo. El gálibo vertical en la zona sería de 4,5 metros.
La actuación también mantendrá la línea del tren, cerrándola con paneles de policarbonato y con la instalación de una barrera vegetal. También se reurbanizará el entorno del paso inferior de la calle Areal, se ajardinarían los taludes y se renovaría todo el pavimento de las aceras en las avenidas Montero Ríos y Os Praceres. El proyecto se completaría con nuevo alumbrado.
La supresión de los pasos a nivel es el resultado del cumplimiento de un mandato judicial por parte del ahora Ministerio de Transportes (antes Fomento). La lucha contra el paso del tren de mercancías por el barrio se retoman a finales de la década de los 1990. La Plataforma en Defensa da Praza dos Praceres llevó a los tribunales su oposición a las obras.
La primera sentencia a favor de los vecinos llegó en 2004. La emitió el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que obligaba a suprimir los citados pasos. En 2007, el Tribunal Supremo desestimó el recurso del Gobierno central y ratificó el fallo anterior.
La resolución judicial no entraba en la solución técnica para eliminar el circuito ferroviario. Por este motivo, el entonces Ministerio de Fomento puso encima de la mesa dos alternativas: enterrar el ferrocarril y crear pasos subterráneos para coches y peatones. Finalmente se apostó por esta última.
El Adif retomó el proyecto en 2022. Hace justo un año, el 4 de febrero del año pasado, sometió el proyecto a trámite de información pública las expropiaciones de los terrenos necesarios para llevar a cabo las obras. En total se ocuparían nueve fincas y otras 13 parcelas de forma temporal.
El avance del proyecto llevó al Concello a emitir distintos informes en contra. En ellos, los técnicos municipales advertían del impacto paisajístico y de la solución adoptada por el Gobierno central. El edil del Rural, Alberto Oubiña, tildó la actuación de "navallada" y "aberración" al considerar que el tren seguiría dividiendo la parroquia de Lourizán en dos.
Los vecinos tampoco apoyaron este plan. Estriceres se opuso a los túneles para vehículos y peatones, al igual que la plataforma de Os Praceres. Estos últimos plantearon la posibilidad de soterrar la línea del tren que llega al Puerto de Marín, lo mismo que en su día defendió el Concello.
