Catorce meses después de que a principios de abril de 2020 la planta de Neumología del Hospital Montecelo se convirtiera definitivamente en planta covid tras empezar a acoger en marzo a las primeras personas infectadas, la situación empieza a volver a la vieja normalidad. Desde este miércoles la séptima impar dejará de estar dedicada exclusivamente a pacientes que ingresan con coronavirus. Así lo confirmó este martes el jefe de Neumología del Complexo Hospitalario de Pontevedra, Adolfo Baloira.
"Estamos teniendo ingresos de siete, ocho pacientes; ahora incluso menos, así que no se justifica tener una planta completa con 21 camas" para casos de covid, explica, más aún con la perspectiva tan optimista a medio plazo. "La tendencia es clarísimamente a la disminución, sobre todo ahora que la vacunación es masiva".
De este modo, las personas que ingresen con covid activo —así como las que están actualmente hospitalizadas— compartirán la planta de Neumología o la de Medicina Interna —en la sexta— con otros pacientes, eso sí, en habitaciones perfectamente aisladas para evitar transmitir la infección. "No hay ni el más mínimo riesgo —subraya Baloira—. Antes ya convivían en otras plantas, en habitaciones aisladas, y ahora, con más gente vacunada, es muy poco probable que se produzca un repunte" de ingresos. En todo caso, apostilla, "nos adaptaríamos".
A mayores, Montecelo continúa manteniendo la Ucri, una unidad intermedia entre la planta convencional y la Uci para atender a pacientes con problemas respiratorios derivados de la covid. "Vamos a mantener esa unidad con monitorización, por si hay pacientes que necesitan esos cuidados".
También está por ver qué ocurrirá en verano con el habitual cierre de camas, puesto que este año, precisa el jefe de Neumología, está previsto que la actividad quirúrgica sea más intensa de lo habitual en estas fechas dada la necesidad de recuperar operaciones aplazadas por la pandemia, sin descartar el "pequeño riesgo" de que aumenten los pacientes con covid.
En todo caso, insiste, la tendencia es claramente descendente. Pese a que los datos del balance oficial son más altos, los ingresos no llegan a la decena ("la mayoría son gente joven que todavía no se ha vacunado y su gravedad es moderada") y apenas hay un centenar de personas que pasan la enfermedad en sus domicilios. Desde el próximo domingo su seguimiento ya no dependerá del personal hospitalario, sino del de atención primaria. También seguirá operativo el comité de seguimiento postcovid. "La mayoría de los pacientes se recupera por completo a los dos o tres meses".
