Aempe baja el telón de los 'afterworks' con la intención de repetirlos en 2019

"Han sido más positivos de lo que aguardábamos", reconoce José María Corujo ► "Esto es el futuro", subraya Pilar Cernuda

Algunos de los asistentes a la jornada vivida en el Liceo Casino, con Pilar Cernuda (segunda por la derecha). RAFA FARIÑA
photo_camera Algunos de los asistentes a la jornada vivida en el Liceo Casino, con Pilar Cernuda (segunda por la derecha). RAFA FARIÑA

El Liceo Casino acogió ayer el cuarto y último de los afterworks organizados por Aempe para fomentar el networking, es decir, reuniones en un contexto ameno y cercano, creando un entorno productivo tras la jornada de trabajo. En este caso, con una base gastronómica, pues durante su desarrollo se degustaban unos pinchos y una pata de jamón ibérico. De ahí el nombre del ciclo: "O que dure un xamón".

La encargada de bajar el telón fue la periodista y escritora Pilar Cernuda, quien incidió en los nuevos modelos empresariales. "Esto es el futuro. La tendencia es ir hacia la economía colaborativa, es decir, para alguien que empieza cada vez es más complicado alquilar un recinto y cada vez hay más exigencias de tiempo, de permanencia y económicas. De esta manera, se abre la posibilidad de utilizar un espacio con servicios comunes y pagando en función de su uso", indicó.

Aunque en Pontevedra fue una apuesta pionera -y arriesgada- por parte de Aempe, la ponente asegura que "en Madrid estoy rodeada de gente que trabaja así" y agregó que "este sistema ayuda muchísimo a mucha gente, porque abrir un despacho, por pequeño que sea, es carísimo. Y de este modo, se pueden compartir espacios, recursos y tecnología, con el consiguiente ahorro para el emprendedor".

Por su parte, José María Corujo, presidente de Ampe, reconoce que "los afterworks superaron las expectativas iniciales y han sido más positivos de lo que habíamos previsto. Y eso nos hace pensar en el año que viene, aunque quizás con otra cadencia".

En el apartado positivo, se queda con que "se ha logrado el objetivo de que se convirtiese en un punto de encuentro". En el negativo estarían "los errores que podamos haber cometido en estas cuatro sesiones, que nos permiten tomar buena nota de ellos para no volverlos a repetir". De cara al futuro también se intentará contar con colaboradores públicos y privados para repartir "el elevado coste económico de las actividades".