La Psicóloga clínica y formada en Psicología Transpersonal Carolina Blay realizará una serie de talleres que empezarán hoy viernes con una charla abierta de 20 a 21.30 horas en el Casino Mercantil e Industrial.
¿Qué temáticas se van a abordar en estas charlas?
La idea es presentar la parte práctica de la propuesta de Antonio Blay, que implica una mirada y un perfil y un proceso de trabajo personal. La idea es tratarlo desde mi punto de vista, desde una forma práctica que pase por nuestros registros vivenciales.
¿Qué objetivos se persiguen?
El objetivo fundamental es que sirvan como espacio de reflexión, de apertura y en el que cada uno, a través de la introspección y de lo que se vaya trabajando y hablando, pueda aportar algo útil en el proceso en el que cada uno se encuentre a nivel personal.
¿Qué es la psicología transpersonal?
Consiste en integrar en una mirada única los distintos niveles de aspectos de la persona, desde la parte más conductual y comportamental, la parte más emocional y cognitiva pero también la parte de una dimensión más transcendente o espiritual. En la propuesta de Antonio Blay están contemplados todos estos niveles de la persona y la psicología transpersonal, tal y como yo la entiendo a través de lo que él decía, es integrar estos distintos niveles y darle a cada uno su importancia, ya que cada uno tiene su propio campo de acción.
¿Cree que la salud mental postpandemia ha empeorado?
Desde mi punto de vista sí. Noto que hay un mayor desgaste . No sé si se puede atribuir directamente a la pandemia, si es efecto o consecuencia de esta, o son como miles de funcionamientos sociales que están saturando mucho la dinámica mental y de salud. Esto ya se sabe hace mucho tiempo y se lleva diciendo. Mi mirada es que hay como un nivel de saturación muy elevado, la pandemia sí ha hecho un acelerón de daño importante.
¿Por qué se empieza a hablar más ahora de salud mental?
Yo creo que es la sensación de saturación, o como algunos le llaman, de precolapso. Las dinámicas son cada vez más desnaturalizadas, aunque están surgiendo muchas líneas positivas que buscan renaturalizar o mantenerse en contacto con lo natural, que garantizan un funcionamiento más sano. Volviendo a lo de antes, se va generando una dinámica que va en contra de la salud mental y que llevamos muchos años acumulando. Creo que ahora se empieza a hablar de esto porque empieza a ser alarmante el nivel de saturación al que se está llegando y porque ahora cada vez hay más sensibilización.
¿Cómo se pueden mejorar estas dinámicas negativas?
Hay mucha fuerza en otras líneas que se están potenciando mucho en positivo. Lo que pasa que de estas se hablan menos porque ahora está saliendo mucho a la luz esta situación de colapso a la salud mental. Con dinámicas positivas me refiero a movilizaciones a nivel social, de pequeño formato, de pequeñas asociaciones con dinámicas de apoyo. Hay muchas líneas que emergen, pero son más silenciosas.
