Cuando la comarca aún se recupera de las consecuencias del tren de borrascas que ha ido llegando desde el Atlántico a lo largo de todo el mes de octubre, noviembre llega con un temporal aún más intenso bajo el brazo. Bautizado Ciarán, se desplaza rápidamente, más veloz de lo esperado, por lo que desde la mañana de este miércoles ya se deja sentir en la provincia de Pontevedra.
La Xunta de Galicia ha emitido una alerta naranja por vientos fuertes, superiores a los 100 kilómetros por hora y con rachas de hasta 120 en zonas altas, y MeteoGalicia mantiene avisos amarillos por las precipitaciones, que se esperan al menos tan intensas como en las perturbaciones de las últimas semanas.
🛰️ A #BorrascaCiaran atópanse en pleno proceso de formación (ciclogénesis) ao leste de Terranova; durante a tarde de mañá e primeira metade do xoves experimentará un proceso moi rápido de profundización (ciclogénesis explosiva) á vez que se move rápido cara ao sur de Gran Bretaña pic.twitter.com/RgkDTz0GJV
— AEMET_Galicia (@AEMET_Galicia) October 31, 2023
Todo ello invita a pensar en una doble jornada (al menos la de este miércoles y también la de jueves) en la que la precaución debe imperar entre los ciudadanos, evitando los desplazamientos en la medida de lo posible y alejándose de zonas en las que puedan caer árboles, lo más habitual en estos episodios, o bien desprenderse elementos de inmuebles.
Ante la situación, que se prevé más dura a partir de las 15.00 horas de este miércoles, todos los servicios de emergencia municipales están preparados, con los Bomberos a pleno rendimiento, lo mismo que la Policía Local y los operarios de Viaqua, que, una vez más, deberán desplegarse por toda la ciudad para evitar las inundaciones que se producen cuando las arquetas dejan de dar salida a toda el agua que se acumula.
Los vecinos de los puntos que ya sufrieron las consecuencias estos días se preparan para nuevas inundaciones en puntos como Lourizán, Combarro o la autovía de Marín, que probablemente vuelva a cerrarse al tráfico en las horas de pleamar.
En la ría se espera oleaje y mar combinada, por lo que el riesgo será importante.