La Fundación Amigos de Galicia vuelve a poner el acento en la situación de vulnerabilidad que padecen muchas personas mayores que viven solas. En Galicia, según datos del IGE, más de 126.600 mayores de 65 años viven solos, muchos por decisión propia, pero otras muchos por no contar con familiares.
Esto ocasiona situaciones de vulnerabilidad y aislamiento social que se han visto agravadas por la covid. También han aumentado los casos de ancianos que ven descuidada su salud por las consultas telefónicas a las que les es difícil acceder, la dificultad de manejarse con internet para pedir citas médicas e incluso la interrupción de sus tratamientos médicos.
Un fiel reflejo de esta situación de vulnerabilidad es que cada vez salen a la luz más casos de personas que aparecen muertas en la soledad de sus hogares, días o semanas después del fallecimiento.
La semana pasada fue encontrada muerta en su casa de Narón una mujer que vivía sola a la que sus perros le habían devorado la cara y un brazo y esta misma semana fue encontrado el cuerpo de un vecino de Ramirás (Ourense) desfigurado por las alimañas.
BALANCE. Durante el pasado año en Galicia fueron encontradas muertas 35 personas en sus domicilios, en la mayoría de los casos por las fuerzas de seguridad o los bomberos alertados por los vecinos.
Amigos de Galicia destaca que en los apenas 20 días que llevamos de año al menos seis personas aparecieron sin vida en sus casas "y prácticamente a diario podemos ver casos de mayores que tienen que ser rescatados por caídas o indisposiciones".
Por este motivo, la entidad pondrá en marcha un programa piloto con la colaboración de entidades vecinales y voluntarios para prestar ayuda a los mayores que se encuentran en situación de soledad.
"Nos ponemos a disposición de quienes necesiten ayuda, que serán atendidos por las trabajadoras sociales y la psicóloga de la entidad para ayudarles con sus problemas", apunta el colectivo.
