Sin consenso y con las tensiones sin resolver. Así concluyó este jueves la reunión celebrada entre la Consellería de Sanidade y los alcaldes y tenientes de alcaldes de los 20 ayuntamientos que integran el distrito sanitario, en la que se volvió a percibir división de opiniones sobre la salud de la sistema público sanitario.
El encuentro se alargó más de lo previsto y se acercó a las tres horas de duración porque todos o casi todos los participantes quisieron hacer uso de su turno de su palabra para exponer las carencias y necesidades que registran sus dispositivos sanitarios.
Al frente de la mesa estaban el conselleiro, Julio García Comesaña, y el gerente del Área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés, José Flores, dos de las autoridades con más competencia para dirigir el timón de la sanidad. El gran escollo es que, pese a ser una reunión extensa, no fue capaz de acercar posturas.
El conselleiro insistió en que el Sergas está adoptando todas las medidas al alcance para paliar el déficit de médicos, pero incidió también en que, si hay que señalar culpables sobre la falta de facultativos, hay que dirigir el dedo hacia el Gobierno central, al que sigue reprochando la no autorización para "ampliar" las plazas de especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria.
Los alcaldes del PP respaldaron la lectura de que se están adoptando medidas para amortiguar la carencia de galenos; uno de los argumentos que, de hecho, esgrimieron para descolgarse de la cumbre de alcaldes que convocó la semana pasada el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores.
No obstante, hubo notas disonantes, como la del alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, que preguntó por qué el área sanitaria está en peor estado que otros distritos.
Y una "decepción" en bloque de alcaldes socialistas y nacionalistas, que trasladaron su malestar por haber asistido a una "cascada de datos" sin "soluciones" concretas para ampliar plantillas a corto plazo.
Faltan 24 médicos
El conselleiro de Sanidade defendió que la población del área sanitaria puede "estar tranquila" porque, aunque puede ser "mellorable", el Sergas trabaja para que tenga una sanidad "de calidade".
Comesaña precisó que en Pontevedra y O Salnés faltan 24 médicos: 16 en PAC y 8 en centros de salud, pero que la consellería ha promovido iniciativas para cubrir todos los huecos posibles. Entre ellas, la concesión de plazas por concurso de méritos o la oferta de un plus a los MIR para que pasen consulta en los últimos cuatro meses de formación.
El conselleiro añadió que en los últimos cinco años ha incorporado al área a 265 profesionales, "como se engadísemos un hospital comarcal", y que se ha hecho "o maior investimento da historia". Fuentes oficiales precisaron que desde 2019 se crearon en el área 39 plazas en Primaria y que este año su presupuesto será de 431,8 millones, "máis do dobre do orzamento da Deputación".
Otra de las medidas destacadas por Comesaña es la propuesta de que los médicos puedan seguir trabajando hasta los 72 años, "como os xuíces", y la ampliación de plazas MIR en Primaria en un 14%, el récord estatal.
"Profunda decepción" en el Concello capitalino
El teniente de alcalde, Tino Fernández, que acudió en representación de Lores (invitado a un acto en Portugal), salió de la reunión con "profunda decepción" por la "realidade paralela" que, según dijo, les presentó el Sergas. "Din que a sanidade vén mellorando o número de facultativos e o sistema de citas, pero non é moi real se logo non te atenden porque non hai médicos. Pódennos matar a datos pero non se axustan á realidade", criticó el socialista.
Fernández reprochó al Sergas que eche "balóns fóra" y que culpe a otras administraciones "dunha situación xa é crónica e se sabía que estaba por vir". Por ello, le pidió que "se poña as pilas e busque alternativas".
"A sanidade pública está sendo arrinconada e con iso se está maltratando a saúde de moitos cidadáns galegos", dijo.
"Preocupación" en Meis y O Grove por la falta de relevo
La alcaldesa socialista de Meis, Marta Giráldez, dijo no dudar de los esfuerzos de la consellería, pero advirtió que de los tres médicos que tiene asignados su concello, uno se jubiló hace casi dos años y no se cubrió la plaza, otro se retira la semana que viene y el tercero hará lo mismo dentro de dos o tres meses. Una situación que calificó de "moi preocupante" porque, por lo que entendió en la reunión, "non hai visos de que esas prazas se vaian cubrir. Non hai médicos".
El socialista de O Grove, José Antonio Cacabelos, fue otro de los alcaldes que salió visiblemente molesto de la reunión, a la que se refirió como "decepcionante". El regidor subrayó que en 2015 el centro de O Grove tenía dos pediatras, siete médicos de adultos, tres médicos de PAC y dos de refuerzo en verano. Y que, en cambio, hoy dispone de "cero pediatras, tres médicos de adultos, un de PAC e ningún reforzo". Un plantel que le llevó a concluir que "no Grove non hai Atención Primaria" y que provoca que haya pacientes "que levan catro meses esperando por unha cita" y bebés de varios meses "que aínda non tiveron revisión pediátrica".
Satisfacción a medias en Marín y Sanxenxo
La alcaldesa del PP de Marín, María Ramallo, señaló que la situación es susceptible de mejora, pero que las medidas emprendidas por la consellería han permitido cubrir dos de las plazas del centro de salud.
Por su parte, el alcalde de Sanxenxo, el popular Telmo Martín, destacó que el déficit de médicos "sucede en todas partes", pero para luego indicar que lo que más le "choca" es que "todas as áreas sanitarias de Galicia están mellor que Pontevedra", algo en lo que pidió "afondar". "Din que estamos mellor que en agosto e eu podo pensar que si, pero non estamos todo o ben que nos gustaría e eu defendo o meu concello", espetó el regidor.
Caldas critica que no haya soluciones a corto plazo
El alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey, tildó la tarde de "perdida, porque a su entender no se aportaron "solucións nin a corto nin a medio prazo" para resolver la situación en la que se encuentran muchos dispositivos sanitarios. Entre ellos, el centro de salud de Caldas, al que se refirió como "un servizo de corte africano".
El alcalde de Poio, Nito Sobral, dijo escuchar "unha música que soa ben", pero consideró que el conselleiro "falla ao non recoñecer que temos un problema coa situación da sanidade pública".
