Amil revivirá el ancestral rito de la ‘rapa das bestas’ en el curro de As Brañas

El programa se abre mañana con el traslado de equinos desde montes próximos a Moraña
Los aloitadores tienen que tener destreza para cortar las crines, además de ser valientes
photo_camera Los aloitadores tienen que tener destreza para cortar las crines, además de ser valientes

Aseguran quienes participaron en la experiencia que supone participar en las maniobras para reunir a los caballos que andan esparcidos por los montes de varios concellos que les cuesta dirigirse a los animales por medio de gritos y que después de varias horas conduciendo la manada, pierden la timidez.

Aquellos que estén dispuestos a vivirla tendrán que madrugar mañana, porque a las 6.30 horas está anunciada la salida desde Amil (Moraña) hasta los montes de Campo Lameiro, Barro y Xeve (Pontevedra). Si todo transcurre como en años anteriores, alrededor de medio centenar de voluntarios acudirán al unto de partida, y regresarán a mediodía, o ya entrada la tarde, con 200 cabezas de ganado en el mejor de los casos.

La primera rapa se celebrará a las 19.30 horas en un curro del monte Acibal situado en el pastizal de As Brañas. Será la primera toma de contacto, en la que les serán cortadas las crines que crecieron durante todo el año a en torno a una veintena de caballos. Y después de una jornada intensa, llegará la hora de la verbena.

Dos sesiones. El domingo, día 12, la actividad de los aloitadores comenzará a las 12.00 horas. Habrá un descanso para comer, para reanudarse a las 17.00 horas. Los caballos son introducidos en el curro en tandas de entre 15 y 20.

Como la situación económica de la asociación Monte Acibal, que organiza este evento, no es boyante, no habrá una segunda verbena, como sucedió en años anteriores, por lo que el protagonismo corresponderá a un grupo de gaitas.

Una vez rapados, los caballos permanecerán en un cercado instalado en el pastizal, que abandonarán el lunes por la mañana cuando sean liberados.

El precio para asistir al espectáculo de la rapa es de tres euros, el sábado, y cuatro en las dos sesiones del domingo. Con el dinero que recaudan, los organizadores hacen frente a los gastos derivados de la organización.

Algunos promotores de la rapa también fueron aloitadores que dejaron paso a otros más jóvenes, a los que aconsejan para que salgan airosos de un reto que exige valor y no está exento de riesgo.

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