La Asociación pola Defensa da Ría de Pontevedra (APDR) ha presentado alegaciones tanto a la ampliación de la EDAR de Os Praceres como a la propuesta de autorización de vertido para esta depuradora y el emisario submarino, reclamando la retirada del proyecto y exigiendo una nueva tramitación.
Según han explicado este miércoles en rueda de prensa Antón Masa y Benito Andrade, la APDR solicita que se retire el proyecto de ampliación de la EDAR y se inicie una nueva tramitación por la vía común de evaluación ambiental teniendo en cuenta las propuestas recogidas en sus alegaciones. También piden que se modifique la propuesta de autorización de vertido para la EDAR y el emisario submarino.
Así, la entidad cuestiona la manera de tramitar "por la vía simplificada" la Evaluación de Impacto Ambiental, ya que entienden que debería hacerse por la vía común puesto que, en la práctica, se trata de hacer una nueva EDAR para un total de 302.400 habitantes.
El colectivo ecologista cree que la Xunta "justifica la ampliación de forma tramposa", argumentando que las opciones alternativas serían hacer depuradoras en cada uno de los ayuntamientos o "no hacer nada, y seguir como hasta ahora, sin depuración en la práctica".
Según ha señalado Antón Masa, la entidad entiende "que hay alternativas intermedias", como son: impedir la entrada de agua del mar a la red de saneamiento, evitar las aguas pluviales que van innecesariamente a la EDAR, obstaculizar la entrada de aguas residuales que deberían depurarse in situ, como las del puerto de Marín y de los polígonos industriales de O Campiño y Ponte Caldelas; construir la EDAR de Poio y estudiar la posibilidad de que Vilaboa depure sus aguas residuales en otra EDAR.
También consideran que, tomadas estas medidas, habría que mejorar la EDAR de Praceres "en base a tecnologías más compactas" y citan como ejemplo la de Reactores Biológicos Secuenciales.
TERRENOS DE ENCE. Otra de los alegaciones se refiere a la alternativa finalmente elegida para que se sitúe en los terrenos que hoy ocupa ENCE. "No resulta serio hablar de unos terrenos de los que no se dispone", comenta el presidente de la APDR, Antón Masa, que recuerda que esos terrenos, de dominio público, "deberán devolverse al estado en el que se encontraban cuando llegó la pastera" y, en todo caso, "será Costas del Estado quien pueda decidir al respecto".
Además de otras cuestiones como que son terrenos "expuestos a la inundación" o que la instalación de la nueva EDAR está afectada por el PGOM, por el Plan de Ordenamiento del Litoral (POL) y por las Directrices de Ordenamiento del Territorio (DOT).
Masa también ha añadido que, a criterio de la asociación, se debería haber diseñado una EDAR cubierta, para evitar o paliar, cuando menos, los olores, la dispersión de patógenos en los procesos de aireación, los ruidos y los impactos sociales y paisajísticos".
Finalmente, destaca la APDR, con la alternativa elegida, la contaminación bacteriológica "va a superar con creces los límites fijados por la normativa vigente para aguas de baño y de cultivos marinos".
AUTORIZACIÓN DE VERTIDO. Por su parte, Benito Andrade ha señalado que la solicitud de autorización de vertido es "excesivamente confusa", porque se refiere la distintas situaciones temporales de la EDAR e incluso a distintos emisarios, cuando "debería llevar a tramitaciones individualizadas y en el momento pertinente para cada una de ellas".
En la APDR están en desacuerdo con el trazado del emisario y con el punto de vertido por el impacto sobre los bancos marisqueros y los arenales de Portocelo, Aguete y Mogor.
Finalmente, Benito Andrade ha advertido de que, de acuerdo con el proyecto presentado, el nuevo emisario va a ser utilizado exclusivamente para verter las aguas residuales urbanas tratadas en la EDAR, mientras que aquellas procedentes de ENCE van a continuar saliendo por el emisario actual, "una propuesta con la que no podemos concordar" puesto que supondrá "un beneficio para ENCE ya que sus aguas pueden pasar a considerarse aguas industriales teniendo un mejor trato".
