Julio Araújo mantiene "una tranquilidad y serenidad absolutas"

La expareja de Sonia Iglesias queda en libertad pero la Policía lo investiga por un delito de homicidio

Inesperado y relevante giro policial el que ha dado la investigación del caso Sonia Iglesias. La Policía Nacional citó este miércoles a Julio Araújo, expareja de la joven desaparecida en agosto de 2010, y a su hermano David para informarles de que están siendo investigados por un presunto delito de homicidio, una tipificación que agrava la de detención ilegal, por la que Julio Araújo ya había sido investigado en 2012, aunque la causa fue archivada por la Audiencia Provincial en 2015 ante la falta de pruebas.

Sin embargo, los dos hermanos se acogieron a su derecho a no declarar y abandonaron la Comisaría apenas una hora después de comenzar las diligencias. El abogado de la expareja de Sonia, Jesús Santaló, explicó que "las diligencias son secretas y no conocemos su contenido, por lo que optamos por no hacer ningún tipo de manifestación". Preguntado en qué estado policial quedaba su cliente, replicó que "igual que estaba", puesto que entró y salió de las dependencias policiales "con absoluta libertad" y sin ningún tipo de restricción.

Santaló dijo desconocer los motivos que habían propiciado la reapertura judicial del caso, "porque al estar declarado el secreto de sumario, no tenemos acceso a ellos", pero mostró su convencimiento de que "los nuevos elementos que determinaron la reapertura de estas diligencias no parecen lo suficientemente sólidos como para adoptar ningún tipo de medida preventiva", en referencia a que su cliente se había podido marchar por su propio pie, pese a estar investigado por homicidio.

De hecho, insistió en que "por lo que puedo intuir, no encuentro datos que aconsejen una reapertura de las diligencias".

Preguntado por cómo está Julio Araújo tras la reapertura del caso, manifestó que "está tan preocupado como estaba antes" y añadió que "siempre ha manifestado una tranquilidad y una serenidad absoluta porque no ha tenido intervención alguna en estos hechos".

"Por lo que puedo intuir, no encuentro datos que aconsejen una reapertura de las diligencias", apunta el abogado de Julio Araújo

En virtud de ese convencimiento, dijo que "es posible, incluso, que pueda estar contento de que se haya reabierto la causa y se esclarezca lo que le ocurrió a su pareja".

SORPRESA. A pesar de eso, admitió que le sorprende la citación de los dos hermanos como investigados en la causa por la desaparición de Sonia Iglesias, al entender que no hay nuevos elementos incriminatorios que lo justifiquen.

Sin embargo, no es la primera vez que David Araújo es interrogado por la Policía. Según apunta la agencia Efe, los investigadores ya se habían fijado en él y se llegaron a analizar las llamadas y los mensajes que había enviado a través de diferentes aplicaciones de mensajería móvil.

Tras el trámite desarrollado el miércoles, los agentes encargados de arrojar luz a la desaparición de Sonia Iglesias deberán mover sus resortes para reencauzar el caso. Todos los indicios apuntan a la aparición de nuevas pruebas que podrían haber dado un impulso significativo a las pesquisas e incluso ha trascendido la existencia de hasta tres informes diferentes en este sentido. Uno de ellos, aportado en diciembre, habría sido el desencandenante de que el Juzgado de Instrucción número 3 hubiese acordado la reapertura de la causa -hasta entonces archivada provisionalmente- para autorizar la entrada y registro de la vivienda que Julio Araújo y Sonia Iglesias compartieron en San Mauro al inicio de su relación.

El equipo de agentes que lleva meses trabajando en exclusiva en esta investigación ha ido aportando el resultado de sus pesquisas tanto a la jueza como al fiscal jefe de la Audiencia, Juan Carlos Aladro, especialmente preocupado por la resolución de este caso. Ahora será la autoridad judicial la que deba resolver sobre el nuevo enfoque de las diligencias.

EN EL PUNTO DE MIRA. La expareja sentimental de Sonia Iglesias y padre de su hijo llegó a declarar como investigado por esta desaparición, pero finalmente la justicia retiró la imputación y archivó el caso en abril de 2015 por falta de pruebas.

Respecto a su hermano David, no es la primera vez que los investigadores se fijan en él, ya que en su día se analizaron las llamadas y los mensajes que había enviado a través de diferentes aplicaciones de mensajería móvil.

En todo caso, nunca llegó a estar investigado oficialmente por la desaparición de la pontevedresa.

Salió de Comisaría y se fue a un bar cercano
Ambos hermanos entraron juntos en Comisaría sobre las 17 horas. Sus rostros transmitían seriedad, pero una cierta calma tensa. Ni siquiera se perturbaron por la nube de micrófonos y cámaras que les rodeó durante unos metros.

Al cabo de una hora, Julio salía de la sede policial y volvió a ser asediado por los medios informativos, pero mantuvo su silencio antes de entrar en un bar próximo. Su hermano David llegó al cabo de unos minutos, pero Julio ya se había marchado.

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