La anécdota: El inmueble en el que vivió el exalcalde del PP Rivas Fontán

Así funciona la ITV de edificios de Pontevedra

La empresa de dos jóvenes pontevedreses está detrás de la primera revisión técnica que el Concello obliga a pasar a los edificios de más de 50 años antes de 2018. La normativa municipal reactiva a las auxiliares de la construcción, que cobran una media de 700 euros por la inspección
La presidenta de la comunidad de vecinos del número 2 de la calle de Forcarei junto a los dueños de la firma Sincofa
photo_camera La presidenta de la comunidad de vecinos del número 2 de la calle de Forcarei junto a los dueños de la firma Sincofa

"Es como pasar la ITV del coche: si se detecta algún fallo, hay que arreglarlo". Alberto Jiménez Alvariño y Fernando Baquero Díaz-Maroto explican así la nueva normativa municipal que obligará a todos los edificios de más de 50 años a pasar una revisión técnica antes de 2018. Estos jóvenes ingenieros pontevedreses, propietarios de la empresa Sincofa, se han encargado de la inspección del primer inmueble que ha cumplido con el reglamento que el Concello acaba de poner en marcha para prevenir accidentes que pongan en riesgo la seguridad pública.

El inmueble en cuestión está situado en el número dos de la calle de Forcarei, en el barrio de O Castañal. "No estaban obligados a pasar la revisión este año, pero como van a solicitar una subvención para un ascensor de alta eficiencia necesitaban el informe", explica Jiménez Alvariño, que asegura que "la comunidad de vecinos colaboró y nos facilitó mucho el trabajo; nos dieron acceso a todo".

Alberto Jiménez Alvariño, ingeniero técnico industrial: "La comunidad de vecinos colaboró y nos facilitó mucho el trabajo; nos dieron acceso a todo"

Aunque la inspección exterior es visual, la normativa aprobada por la Concellería de Urbanismo obliga a los técnicos a revisar el interior de los pisos. "El informe es minucioso, por eso es necesario entrar en todas las viviendas para comprobar si existe alguna deficiencia", apunta.

La obtención del certificado de la ITV es indispensable no solo para cumplir con el reglamento pontevedrés, sino también para solicitar subvenciones o vender o alquilar una propiedad inmobiliaria. De hecho, este tipo de inspecciones incluyen un certificado de eficiencia energética, fundamental para este tipo de operaciones.

CARTAS DEL CONCELLO. La norma impulsada por el teniente de alcalde y edil de Urbanismo en funciones, Antón Louro, ha abierto un nuevo nicho de negocio para las auxiliares del sector de la construcción, que cobran una media de 700 euros por llevar a cabo esta inspección.

María del Carmen Fregueiro, Pta. de la comunidad de vecinos: "Sabíamos que la revisión era obligatoria y entre todos los vecinos decidimos pasarla cuanto antes"

Un total de 295 edificios del centro y de las parroquias están obligados a pasar estos controles a lo largo de este año. Se trata de todos los construidos antes de 1943. El Concello, que ha publicado una relación de los inmuebles afectados en su página web y en el tablón de anuncios municipal, se lo ha comunicado por escrito a las comunidades de vecinos afectadas por la normativa. Aún así, es posible que las cartas no hayan llegado a todos los edificios que deberán pasar los obligatorios controles.

"Nosotros sabíamos que la revisión era obligatoria (por la subvención para el ascensor) y entre todos los vecinos decidimos pasarla cuanto antes", asegura María del Carmen Fregueiro, presidenta de la comunidad de vecinos del número dos de la calle de Forcarei.

Los dueños de los inmuebles pueden acceder a subvenciones estatales para costearse la revisión técnica que solicita el Gobierno local. El tope máximo es de 500 euros, a razón de 20 euros por vivienda o por cada cien metros cuadrados de superficie de la propiedad. El importe total de la ayuda no podrá superar el 50 por ciento del coste de la denominada ITV municipal.

Comentarios