Atribuyen al cocinero del Elcano la carga de la droga en el buque escuela

El Tribunal Militar reabre el caso tras las nuevas pruebas presentadas por el Ministerio Fiscal ►Unas cajas que entraron en el buque en Cartagena de Indias ocultarían los 127 kilos de coca

photo_camera Parte del alijo decomisado en Elcano. DEA

En el mes de abril de 2014, el buque escuela Juan Sebastián Elcano realizó una de sus escalas en el puerto colombiano de Cartagena de Indias. En los cinco días en los que permaneció atracado en la dársena sudamericana, una organización criminal logró introducir, con la connivencia de parte del personal del navío español, más de 150 kilos de cocaína y una importante cantidad de heroína (al menos cuatro kilos). La investigación, que había sido sobreseída provisionalmente en agosto ante la imposibilidad de determinar qué miembros de la tripulación eran parte implicada en el delito, acaba de reabrirse por orden del Juzgado Togado Militar número 12 de Madrid. El tribunal accedió a ello en base a las nuevas pruebas presentadas por el Ministerio Fiscal, que atribuye a quien por aquel entonces era el cocinero del emblemático buque la responsabilidad de la entrada de unas cajas de víveres durante la mencionada escala en el puerto colombiano. El juzgado incorporará a los autos el libro del Cuerpo de Guardia en el que debería aparecer reflejado el embarque oficial de alimentos al barco con el fin de comprobar si las citadas cajas «obedecían a una necesidad real o si se realizó de forma subrepticia y amparada por, según parece, haberse hecho cargo de dicha mercancía el cocinero».

El auto de reapertura incluye el requerimiento para comparecer en calidad de investigado del citado cocinero, además de la presencia del panadero y del despensero, que inicialmente declararán como testigos, con la posibilidad de que su situación procesal sea diferente en función de los acontecimientos futuros.

LA FISCAL DE NYC. La fiscal especial Antidroga de New York City, Bridget Brennan, explicó en su día que «aquí, en New York, los marineros introducían la heroína y la cocaína y se la entregaban a los distribuidores locales». Brennan añade que «esta investigación desmantela una importante red de importación de droga dirigida desde Colombia que empleaba para el contrabando un emblemático navío español. El barco, una atracción turística, era un disfraz perfecto para que los traficantes transportasen cargas ilícitas a través del Océano Atlántico. En New York atracaba muy cerca del Intrépido (un portaaviones convertido en museo que visitan miles de turistas). Solo merced a la colaboración de las autoridades de España, Colombia y New York se pudo desarticular esta sorprendente operación de contrabando».

El jefe de la policía estatal, Joseph d´Amico, explicó tras las primeras pesquisas que los narcotraficantes colombianos habían pagado 32.000 euros a los tripulantes del Elcano que colaboraron en el narcotransporte. En New York se realizaron dos incautaciones procedentes del Elcano en aquel mes de abril. La primera, de 20 kilos de cocaína, y la segunda, de cuatro de cocaína y otros cuatro de heroína. Cada una pertenecería a una organización diferente.

En cuanto al grueso del cargamento (127 kilos hallados en el pañol del contramaestre y que estaban en el barco a su paso por Marín), los nuevos datos parecen ofrecer algo más de luz acerca de la identidad de las personas que pretendían colarlo en España.

Comentarios