Confirman la condena al 'Maestro Cissé', el presunto vidente de los mil nombres

La Audiencia le ha sentenciado a 21 meses de prisión y el pago de más de 9.000 euros ► Es la pena impuesta al senegalés por estafa a dos mujeres que creyeron en sus 'atribuciones'

Supestas identidades empleadas por el condenado. DP
photo_camera Supestas identidades empleadas por el condenado. DP

Kandioura Cissé sigue en activo. El conocido como 'Maestro Cissé', pero también por innumerables apelativos más (que figuran en las tarjetas publicitarias que siguen apareciendo en buzones y calles de la ciudad) acaba de ser condenado en segunda instancia por un doble delito de estafa. 21 meses de prisión y la devolución de cerca de 10.000 euros es la pena que deberá cumplir el presunto vidente senegalés, que aún tiene la opción de presentar un nuevo recurso ante el Tribunal Supremo.

Cissé, que ya había sido condenado por el Juzgado de lo Penal 2 de Pontevedra por estos hechos, deberá abonar 7.358 euros a una de las víctimas y 1.752 a la otra en concepto de responsabilidad civil. Esas son, según el juez, las cantidades estafadas por el vidente, que se anuncia como "especialista en todo tipo de dificultades y problemas", a dos mujeres que, tras ver sus anuncios, concertaron sendas citas con él.

Los hechos concretos que desembocan en la presente sentencia ocurrieron en el año 2016. La primera de las mujeres que acabó siendo estafada acudió al 'consultorio' por vez primera a principios de año, pero regresó allí en varias ocasiones más. "En una de ellas le dijo que para solucionar uno de los problemas que tenía debía entregarle 5.402 euros, y que ese dinero se lo devolvería a los pocos días".

Además de negar las pruebas exponiendo una versión contraria de los hechos, el letrado de Cissé expuso en su discurso que no existió el engaño

El dictamen explica que la víctima, "confiada en que dicho dinero le sería devuelto, el 5 de marzo le entregó esa cantidad y posteriormente le dijo que era necesaria la entrega de 1.916,25 euros más, lo que hizo la señora, también en la creencia de que le serían devueltos. A pesar de ello, no devolvió ninguna de las cantidades, ni tuvo tal intención".

En cuanto a la segunda víctima, la estafa tuvo lugar a partir de febrero, cuando, igual que la anterior, acudió al citado 'consultorio' con la intención de solucionar problemas personales. Tras varias citas, Cissé le conminó a entregarle 1.752 euros, cantidad que, en teoría, le iba a devolver a los pocos días. "En realidad, la intención del acusado era quedarse con esta cantidad, algo que hizo".

La jueza declaró "aptas para destruir la presunción de inocencia" las declaraciones de las dos víctimas en el plenario, así como la de una tercera persona, en calidad de testigo.

Además de negar las pruebas exponiendo una versión contraria de los hechos, el letrado de Cissé expuso en su discurso que no existió el engaño necesario para sostener la acusación por un delito de estafa. La sala segunda de la Audiencia tampoco admitió esa alegación, confirmando la sentencia.

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