El barrio de Os Salgueiriños, que hace una década sufrió una intensa transformación que la sacó de la situación de degradación en la que se encontraba, alerta sobre la situación de abandono en la que encuentra. Los residentes en esta pequeña colonia, situada entre las calles Joaquín Costa y Loureiro Crespo, advierten de que las obras de humanización realizadas (con una inversión superior al millón de euros) precisan de un plan de mantenimiento. Consideran que, de lo contrario, la zona corre el riesgo de volver a una situación de marginalidad.
Vecinos de este ámbito urbano, que cuenta con 74 viviendas ubicadas en bloques de dos y tres alturas construidas en la década de los 50, manifiestan su malestar e indignación por el "abandono absoluto" del barrio que, tras las obras impulsadas por el Concello (con una inversión de más de un millón de euros) para dotarlo de calidad urbana, presenta un aspecto degradado y que resulta, aseguran, "muy mejorable".
Las hierbas han ido creciendo junto a las fachadas de las casas y en los alcorques en los que fueron plantados los árboles que embellecen el barrio, un problema que causa la propagación de insectos y de roedores; mobiliario urbano que precisa reposición (en concreto papeleras rotas que no se vuelven a colocar) y sumideros taponados por tierra y hierba que dificultan la canalización de las aguas pluviales son algunas de las deficiencias que observan los residentes. Confían en que el Concello envíe una brigada municipal para inspeccionar la zona y efectuar las actuaciones que correspondan para resolver las necesidades del barrio.
Además, los habitantes de esta emblemática zona urbana recuerdan que para la integración del barrio en la ciudad la asociación de vecinos de Os Salgueiriños había realizado un extraordinario esfuerzo durante ocho años de reivindicaciones ante el Concello que habían dado como fruto el plan de humanización con el que consiguieron dar al barrio una profunda remodelación y lavado de cara.
Esta obra de reforma urbana llevada a cabo por el Concello ha supuesto la primera actuación de calado en más de cincuenta años y ha permitido adaptar la zona a los servicios urbanos de que gozan el resto de habitantes del casco urbano de Pontevedra.
Así, se renovó totalmente la red de abastecimiento de agua y de alcantarillado, se instaló nueva iluminación pública y las referidas canalizaciones para red eléctrica, telefónica, de cable y gas, y se mejoraron los muros perimetrales del entorno. El proyecto siguió también el modelo de preferencia y defensa de la accesibilidad con una plataforma única y la habilitación de diversas rampas para eliminar barreras arquitectónica.
Los residentes insisten en que Os Salgueiriños está "dejado de la mano de Dios", por lo que reclaman "mayor atención" por parte de la Administración local. Recuerdan que muchos de los habitantes del barrio son personas de avanzada edad que no pueden llevar a cabo, "aunque quisieran", trabajos de mantenimiento como el desbroce de las hierbas que crecen junto a las fachadas de sus viviendas y en los alcorques. Por eso, confían en que el Concello asuma sus competencias, se ponga "manos a la obra" y resuelva las deficiencias porque, de lo contrario, se verían obligados a estudiar la adopción de medidas.
