El BNG instará a la Xunta en el próximo Pleno a anticiparse a la hipotética salida de Ence de la ría y a empezar a programar dos acciones: la búsqueda de lugares alternativos para levantar una papelera con más ciclos productivos y la aprobación de un plan de ordenación urbanístico para la recuperación de los terrenos de Lourizán.
La iniciativa fue presentada este viernes por el diputado nacionalista, Luís Bará, tras acusar al Gobierno gallego de "manipular" de forma "burda" el informe del Consello Consultivo sobre la posible adscripción de los terrenos de Ence al Puerto de Marín. El nacionalista replicó las declaraciones vertidas por distintos portavoces de la Xunta e incidió en que "o Consello Consultivo di que o Porto de Marín podería ampliarse cara os terreos de Ence, pero non di nada sobre a posibilidade de incorporar Ence. O propio presidente do Consello Consultivo sinalou esta semana no Parlamento que "o informe di o que di" (...) E nunha aclaración posterior ao informe o Consello sinalou que o futuro de Ence depende do Supremo", indicó en rueda de prensa.
Subraya que el futuro de la pastera depende del Supremo y emplaza a la Xunta a programar la construcción de una nueva fábrica y la recuperación de los terrenos
El diputado añadió que, aun en el supuesto de dejar Ence a un lado, la ampliación del Puerto de Marín en los terrenos de Celulosas es una estrategia inviable, ya que resulta "incompatible" con el Plan de Ordenación do Litoral (POL) y las Directrices de Ordenación do Territorio (DOT). Dos planes aprobados en 2011 por el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo que catalogan los terrenos de Ence como un área de "mellora ambiental e paisaxística", y cuya recuperación ya se preveía llevar a cabo a partir de 2018 ( para cuando estaba prevista la finalización de la concesión de Ence). Según dijo, si la Autoridad Portuaria de Marín quiere ganar más superficie, deberá seguir la estela del Puerto de Vigo, "que está crecendo cara a Plisan", y buscar otra opción para crear un puerto seco.
NUEVO COMPLEJO. El diputado del BNG reiteró que si el Tribunal Supremo anula la sentencia de la Audiencia Nacional que ha declarado nula la prórroga de la concesión, Ence podrá seguir en Lourizán pero que, si por el contrario, confirma el veredicto que está sobre la mesa la fábrica tendrá que cerrar sus puertas. En su opinión, sugerir lo contrario es "unha operación indecente, que crea falsas ilusións á cidadanía e aos traballadores".
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Bará recordó que la batalla judicial de Ence puede tardar varios años, pero que también podría resolverse en cuestión de "tres ou catro meses" si finalmente el Supremo no admite a trámite los recursos de casación anunciados por la empresa, trabajadores y auxiliares para validar la prórroga de la concesión. Por ello, reiteró que el tiempo "corre en contra" y que la Xunta "debe asumir as súas responsabilidades como Goberno galego, non actuar como títere de Ence".
Entre las actuaciones urgentes, el nacionalista priorizó la búsqueda de ubicaciones para levantar una fábrica que dé el relevo a Celulosas y con capacidad no solo para producir pasta de papel, sino también "fibras textís, derivados da madeira e substitutos do plástico. En Galicia -añadió- lévase a cabo o 50% da corta de madeira que se fai no Estado e, en cambio, só representa o 13% do PIB e do emprego".
Para Bará el Ejecutivo gallego debe aprovechar los fondos europeos en circulación para financiar la hipotética recuperación de los terrenos y para poner en marcha este nuevo complejo industrial, en colaboración con algún operador privado, el sector forestal y las comunidades de montes.
Por su parte, la Autoridad Portuaria está pendiente de celebrar un Consejo para decidir si inicia o no los trámites para solicitar a Puertos del Estado la adscripción de los terrenos de Ence. Una operación para la que prevé recibir el suficiente apoyo, pero cuyo efecto permanecen entre interrogantes, ya que la última palabra la tiene el Ministerio de Transición Ecológica, que ya se ha posicionado en contra de la adscripción.
El ‘popular’ insistió en que la Xunta quiere "que se queden esos puestos de trabajo" en Pontevedra y consideró "incomprensible " que representantes municipales de Pontevedra digan "que no les vale" el dictamen del Consello Consultivo, "cuando el Ayuntamiento de Pontevedra acudió muchas veces a este órgano y se basó en lo que decía para tomar decisiones". Además, Rueda cuestionó este viernes "el empeño" de algunas personas en "negar" la posibilidad de que Ence permanezca en Pontevedra.
