La compañía Force Protection del batallón Zamora, uno de los más importantes de la Brilat, trabaja estos días en el campo de maniobras de Parga (Lugo) como parte de la preparación de cara al inminente despliegue de tropas que tendrá lugar en Mali en el marco de una misión internacional bajo el paraguas de la Unión Europea.
Los soldados de la base pontevedresa, de cuyo acuartelamiento partirá el grueso de la expedición que viajará a África, realizaron, entre otras maniobras, prácticas de tiro, con el objetivo de afinar al máximo el entrenamiento de cara a la citada misión, que comenzará, salvo novedades de última hora, en el mes de noviembre.
La Brilat, que ya conoce el trabajo que se desarrolla en Mali (sus soldados estuvieron destinados allí hace algunos años en el marco de la misma misión de la Unión Europea), tendrá como cometido la instrucción de las Fuerzas Armadas del país africano, que tienen ante sí un complicado panorama con una importante presencia de terroristas dentro de sus fronteras, lo que pone en serio riesgo la seguridad del país.
Paralelamente, una parte del medio millar de militares de la base de Figueirido que acudirán a Mali tendrán como cometido evitar cualquier acción en contra de los instructores y de los propios soldados africanos durante el proceso.
EN LÍBANO. Por otra parte, el jefe de la Brilat voló a Líbano para reunirse con los máximos responsables de la Alianza Atlántica en la base Miguel de Cervantes, con el objetivo de conocer la situación actual pocas semanas antes de la partida del contingente de la Brilat hacia el país de Oriente Medio.
En este caso serán unos 700 efectivos de la Brilat, la mayor parte de ellos procedentes de la base de Siero (Asturias), los que permanecerán aportando seguridad a la Blue Line, en la frontera entre Líbano e Israel, hasta bien entrada la primavera.
