Un buey de 700 kilos para los más sibaritas

JORNADAS GASTRONÓMICAS ▶ Los aficionados a la carne están de enhorabuena. Un asador pontevedrés ha apostado por la calidad y ha adquirido un exclusivo ejemplar de buey de Galicia para promover, de forma pionera en la ciudad, unas jornadas gastronómicas alrededor de la especie. El animal ya se puede degustar en todas sus variedades
De izquierda a derecha: Carlos Lorenzo, Carlos Torres, (propietarios del asador A Ganxa do Costado) y el suministrador del buey. GONZALO GARCÍA
photo_camera De izquierda a derecha: Carlos Lorenzo, Carlos Torres, (propietarios del asador A Ganxa do Costado) y el suministrador del buey. GONZALO GARCÍA

Croca, picaña, solomillo, tartar, carpaccio, hamburguesas y, por supuesto, chuletón de auténtico buey de Bandeira. Esa es la apuesta que realizan Carlos Lorenzo y Carlos Torres, responsables del asador A Granxa do Costado, un restaurante de referencia en cuanto a carnes se refiere y que desde este mismo jueves promueve las I Jornadas Gastronómicas de Buey. "De todos es sabida la picaresca de meter vaca por buey. Si quieren un buey de primera, aquí tienen uno". Marcos, proveedor de VacaPremium, la firma que cría estos animales, explicaba el miércoles tras depositar la pieza en el restaurante que "solo tenemos unos 200 de estos cada año y se envían a distintos países del mundo. Es muy exclusivo".

El restaurante, que espera una gran acogida por parte de sus clientes, recibió un animal que fue sacrificado a mediados de octubre con un peso algo superior a los 700 kilos. Su proveedor explica que "está en una cámara de maduración en seco" al tiempo que desvela que "en Pontevedra nadie tiene algo así". "Sí servimos a algunos restaurantes gallegos con Estrella Michelín, pero nunca en esta cantidad".

"La trazabilidad de este animal es total, tal y como nos exige el marco legal vigente. Se puede saber hasta qué comió a lo largo de su vida", apunta el proveedor.

En concreto, el buey que será degustado a lo largo del mes en el asador pontevedrés fue criado en Carral y sacrificado en el matadero de Bandeira, en la zona de Galicia en la que se produce la carne que acaba siendo consumida en los restaurantes de todo el país.

Uno de los responsables del asador explica que se ofrecerán toda clase de variedades alrededor del animal recién adquirido, y señala que, junto a él, seguirán ofreciendo las carnes ya conocidas por sus clientes, tales como Rubia Gallega, Frisona y Cachena, ésta última típica del Sur de la comunidad autónoma y del Norte de Portugal. "Hemos esperado a traer el género hasta que se encontrase en un estado óptimo de maduración", explica Carlos, que añade que todos estos animales (no solo el buey, sino la vaca, ya habitual en su carta) "se caracterizan por tener un sabor especial, una textura muy suave y apreciada por los paladares más exigentes".

El propietario del establecimiento hostelero añade que "solo las piezas excelentes serán maduradas para sacar en cada chuleta el mejor sabor y matices".

Los promotores de la idea animan a todos los vecinos de la ciudad y del resto de la provincia a acudir al restaurante en los próximos días. Sobre los precios, señalan que irán hasta un máximo de 100 euros el kilo, pero existirán opciones para todos los gustos según la variedad elegida.

 Además, si tienen suerte, los clientes podrán ver a una familia de corzos que habita muy cerca del restaurante, entre el barrio de Valdecorvos y la avenida de Lugo, que visita con frecuencia los exteriores del mismo en busca de pasto.

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