En busca de lo inverosímil: los grandes alijos de cocaína hacia Galicia llegan por sorpresa

Cuando no hay información, las fuerzas recurren a la técnica y al olfato para levantar la última barrera
Inspección a la que se someten los contenedores 'calientes'. IMACO PRODUCCIONES
photo_camera Inspección a la que se someten los contenedores 'calientes'. IMACO PRODUCCIONES

El combate contra el narcotráfico gallego se juega en distintos escenarios. Son bien conocidas las operaciones marítimas que suceden a las grandes investigaciones de la Policía Nacional, Vigilancia Aduanera o la Guardia Civil en las Rías Baixas, lo mismo que las macrorredadas que se efectúan en zonas calientes de O Salnés o en el interior de los inexpugnables poblados chabolistas de toda Galicia. Más grises, pero no menos importantes, son las actuaciones preventivas que desarrollan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en las infraestructuras críticas, especialmente de la provincia de Pontevedra. Resulta imprescindible una combinación de experiencia, pericia, medios técnicos y recursos policiales para intentar detectar los cargamentos de droga cuando ya han alcanzado la provincia, bien por tierra, en coche, bien por mar, ocultos en contenedores de mercancía. Para desarrollar esta labor destaca el trabajo de la Unidad Especial de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Policía, por una parte, y las unidades de análisis de riesgos y escáner que comparten la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera en los puertos. Las dificultades para detectar un alijo entre productos frescos o congelados son mayúsculas, no digamos si la cocaína viaja introducida en los propios palés o en la misma estructura metálica del container. Sin embargo, Aduanas no se da por vencida. Con una media de unos 40 camiones registrados cada día, presume de vigilar el puerto más seguro de España, o al menos el que más inspecciones efectúa a lo largo del año.

Punto caliente Aduanas somete a escáner a muchos de los contenedores que llegan de Sudamérica

EL SISTEMA DE CONTROL. La informática es, hoy por hoy, esencial en todas las facetas de la vida, y también en el área de inspección de contenedores. La unidad de Análisis de Riesgos de Vigilancia Aduanera efectúa un cribado de los que deben observarse con detalle a través de los rayos x. Los puertos colombianos, ecuatorianos y brasileños constituyen a priori un origen sospechoso, más aún cuando los barcos transportan plátanos, piñas o pescado congelado, productos empleados por las mafias del narcotráfico para ocultar la cocaína. Ello hace que los investigadores introduzcan en el sistema online los códigos de sus contenedores, considerados calientes. Con esa etiqueta tienen la obligación de pasar por el área de escáner antes de abandonar la infraestructura portuaria.

Una vez que el camión llega a la zona, comienza por atravesar el dispositivo que mide la radiación. "Nunca hemos tenido un positivo ahí, pero es un paso previo que se exige a todos". Interviene Camilo Carrón, jefe de la área de escáner de Vigilancia Aduanera en el Puerto de Vigo.

A continuación, el contenedor se introduce en el túnel del escáner hasta situarse al lado del dispositivo. Con cámaras de seguridad para vigilar todo el entorno y evitar injerencias de cualquier personal ajeno a las fuerzas de seguridad, el camión pasa bajo el arco sobre el que se proyectan los rayos. En tiempo real, el jefe de área recibe la imagen del interior del contenedor. "Podemos observar perfectamente si hay algún bulto sospechoso". En ocasiones, los narcos sitúan mochilas en huecos entre la carga, aunque normalmente son más ingeniosos. "La experiencia nos permite detectar si se ha movido algo", añade Carrón, que, sin embargo, admite que si los narcos han colocado la mercancía en el interior de las piñas, por ejemplo, no hay forma de saberlo con el sistema del que disponen. "Para eso necesitamos información previa, y no siempre la tenemos". 

La inspección no dura más de cinco minutos, salvo que los especialistas detecten algo sospechoso que les anime a retirar los precintos y abrir el contenedor. Esto se da en casos muy contados, pues la mercancía no puede quedarse demasiado tiempo en puerto. Es por ello que las organizaciones criminales suelen emplear productos frescos para ocultar sus cargas ilícitas.

¿El más seguro? El puerto de Vigo tiene el mayor índice de inspecciones de las dársenas españolas

GUÍAS CANINOS. La Unidad Especial de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Policía de Galicia actúa, en ocasiones, como complemento al escáner. Su aparición en los puertos se produce cuando existe Inteligencia que indica de que el contenedor oculta droga, pero no se aprecia a simple vista. El olfato y el entrenamiento de los canes aporta la información precisa para centrar el punto en el que puede encontrarse, permitiendo así la actuación de los especialistas en un lugar en concreto.

Los guías caninos, unidad que dirige en Galicia Manuel Cubero, también participan en rastreos preventivos en aeropuertos, estaciones de tren o autobús o incluso cerca de centros escolares, además de en las operaciones para las que son requeridos. Componen una última barrera contra los narcos, una vez que creen haber superado a las autoridades. 

En las puertas o en las tablillas de los palés del container
La imaginación de los narcotraficantes no tiene fin, y los puertos de la provincia de Pontevedra ya han sido escenario de inspecciones en las que se sabía que debía haber cocaína pero que su hallazgo resultaba muy complicado. Un ejemplo de ello fue una de las operaciones desarrolladas por el Greco Galicia, cuyos agentes tenían la seguridad de la presencia de droga en una carga procedente de Sudamérica. Tras horas de rastreo, fue un golpe de suerte lo que les permitió saber que la coca, en láminas de 80 gramos, estaba oculta dentro de las tablillas de los palés que, a su vez, soportaban la mercancía legal.
En otra ocasión, con la ayuda de los perros, las Fuerzas de Seguridad encontraron la cocaína adosada a las mismas chapas metálicas de la puerta del contenedor, un sistema que se ha visto en más de una ocasión.
Otro sistema conocido es la mezcla de la cocaína con otras sustancias (por ejemplo, harina de palmiste) para su posterior extracción en laboratorios clandestinos. Este método fue descubierto en el Puerto de Marín en 2020.
En cada una de estas intervenciones resulta básica la coordinación entre quienes manejan la información, los que llevan a cabo la inspección y los guías caninos, y en ocasiones ni tan siquiera ese trabajo coordinado logra dar sus frutos.
La entrada de cocaína a través de contenedores es la vía más utilizada por los narcos en el siglo XXI, por delante de los barcos. 

Manuel Cubero, jefe de la Unidad Especial de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Policía de Galicia: "En la pandemia hemos salido las mismas veces que en años anteriores"  


La Unidad Especial de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Policía de Galicia se encuentra en la Comisaría de A Coruña. Es en sus instalaciones, ubicadas en el acceso Sur de la ciudad herculina, donde descansan los animales adiestrados en la búsqueda de sustancias estupefacientes, que también tienen la capacidad para detectar billetes de curso legal y armas, todo ello básico a la hora de combatir a las mafias del crimen organizado que se dedican al narcotráfico en las Rías Baixas en especial y en Galicia en general. El responsable de la unidad es Manuel Cubero, que explica que "dentro de la búsqueda de drogas, billetes de curso legal y armas, hay dos ámbitos de actuación bien diferenciados", y se refiere a los supuestos en los que se interviene "con carácter preventivo" y los que se actúa "con carácter selectivo". Cubero resume que, en el primero de los casos, las tareas tienen que ver con "colaborar en centros de educación, por ejemplo, pero también presentarnos en las estaciones de autobuses", lo que sirve de disuasión. En cuanto a las intervenciones de carácter selectivo, Manuel Cubero señala que se producen "cuando ya colaboramos directamente con el grupo que nos ha solicitado el apoyo", normalmente Greco Galicia o las Udyco repartidas por la Comunidad Autónoma, o bien los grupos de estupefacientes.

En cuanto a la forma de actuar, el jefe de la Unidad Especial de Guías Caninos relata que "una vez que recibimos el aviso llevamos a cabo la preparación del equipo o de los equipos, según el caso, de detección de drogas, billetes de curso legal y armas, y allí donde nos reclaman nos desplazamos. Una ves que estamos en el punto, colaboramos directamente con el grupo que nos ha solicitado el apoyo". 

Manuel Cubero señala que, si bien el ámbito de actuación del equipo que dirige es muy amplio, la mayor parte de sus intervenciones tienen lugar en la provincia de Pontevedra y, concretamente, en las Rías Baixas, dado el volumen de operaciones antidroga que allí se desarrollan. "La Unidad Especial de Guías Caninos, dentro de su ámbito de trabajo, que es toda la Comunidad Autónoma de Galicia, interviene principalmente en las Rías Baixas, pero también en Ourense y, un poco en menor medida, en la parte Norte, colaborando siempre con los grupos de estupefacientes, UDEF, Udyco y Greco". 

Por último, el mando policial explica que la pandemia no ha restado actividad a su grupo. "En relación a la búsqueda de drogas, billetes de curso legal y armas, en lo que respecta a la actividad en el último año, en relación a la pandemia, más o menos se ha mantenido estable, hemos salido prácticamente las mismas veces que en años anteriores". 

Camilo Carrón, jefe del área de escáner de la AEAT en el puerto de Vigo: "Vigilamos más porque la fruta que entraba por Marín ahora entra por Vigo" 


Camilo Carrón lleva muchos años dirigiendo el área de escáner de contenedores de la Agencia Tributaria en el Puerto de Vigo. Su experiencia le permite recordar épocas de mayor o menor actividad, y destaca que en los últimos meses, los análisis son constantes debido a los cambios en las empresas que transportan los productos frescos por el Noroeste Peninsular, que dejó de introducir Maersk por la ría de Pontevedra en beneficio de la dársena olívica.

"Este último mes tuvimos 410 contenedores. La cantidad subió mucho debido a que la fruta que se despachaba antes por Marín ahora se despacha aquí. Al día, dependiendo, hay jornadas en las que podemos hacer cincuenta y hay días en los que hacemos 15. Todo depende del movimiento del puerto, en función de cuándo vienen esos barcos de la fruta. El récord aquí lo tenemos en 58 contenedores inspeccionados, solo por la mañana". 

Carrón explica que la seguridad existente en las Rías Baixas hace que los narcos busquen otras vías de entrada, de ahí que el número de inspecciones positivas haya bajado mucho en los últimos años.

"El porcentaje de positivos es pequeño debido a que este es el puerto en el que se hace un porcentaje de apertura de contenedores más elevado de España. Aquí hay mucha vigilancia, se lo ponemos un poco más difícil, y entiendo que buscarán otros puertos para introducir las mercancías ilícitas". El especialista de Vigilancia Aduanera añade que "lo que más escaneamos son los contenedores procedentes de Sudamérica. También inspeccionamos algunos de China, de India o de Corea, que llevan otro tipo de mercancía. Los de fruta y de pescado congelado vienen de Sudamérica principalmente, y esos son los más vigilados. De Colombia, Argentina, Brasil o Ecuador, toda esa zona". 

Sobre el modo de actuar cuando detecta un contenedor sospechoso de contener sustancias estupefacientes (cocaína) en su interior, el jefe del área del escáner relata que "nosotros aquí tenemos a la unidad operativa, y una vez que sale algo sospechoso, todo depende, si hay información o no. Si hay una investigación detrás se monta un operativo para seguir el contenedor hasta el destino, y de ese modo determinar qué personas están involucradas". 

Verónica Lozano, adiestradora de la policía: "Se hacen búsquedas en ambos sentidos por las corrientes de olor" 


"Primero se hace una búsqueda externa, que la solemos hacer en ambos sentidos, se puede mirar el maletero, la batería, y luego, ya por dentro". Verónica Lozano es, junto a Lorenzo Fernández, una de las agentes dedicadas al adiestramiento de los perros antidroga y su posterior acompañamiento a los puntos en los que deben buscarse los alijos. La guía canino explica que "lo que suelo hacer al principio es dejar a la perra un poquito libre, que ella busque independientemente, y si veo que hay que centrarla, pues le voy indicando yo por donde quiero que busque". 

Verónica trabaja con Sena, una Pastor Belga Malinois especializada en la búsqueda de sustancias estupefacientes, billetes de curso legal y armas. "La forma de señalizar para lo que está adiestrada en el caso de esta perra, es activa. Eso quiere decir que cuando encuentra las sustancias para las que le hemos adiestrado, las señaliza rascando. Entonces, una vez que marca, lo que hacemos es premiarla, en este caso, con la pelota. Para ella, su recompensa por encontrar para lo que está adiestrada es la pelota. Actúan por juego".

Una de las dificultades que deben afrontar los perros y sus guías en las intervenciones es la discriminación de los olores. "Por eso iniciamos las búsquedas con un rastreo inicial en ambos sentidos, por las corrientes de olor, intentando que busque el foco máximo. A veces puede salir el olor de la rueda trasera derecha y resulta que la droga parte de la izquierda. Entonces, enseñándoles a focalizar encontramos el foco". Y entonces, en el momento en que el perro marca, llega el turno de los especialistas. En el caso de un vehículo con una caleta es el especialista en automoción, "por si hay que hacer alguna cosa con el coche. Nosotros le indicamos que está en un punto determinado y él ya hace esa maniobra, porque a veces hay zonas que no tienen un acceso fácil por nosotros y ellos acceden a ellas".

Sobre el día a día de estos animales, Verónica, Lorenzo y el resto de sus compañeros desarrollan entrenamientos para que los canes mantengan su olfato al cien por cien para cuando son requeridos por las unidades especiales de lucha contra el narcotráfico. "Nosotros nos ponemos prácticas, intentamos que se asemejen a la realidad lo más posible, para que luego, cuando tengan que hacer un caso real, sepan lo que tienen que hacer".