Atrás quedaron aquellos días en los que incluso había que esperar para poder hacer una llamada telefónica desde una cabina porque estaba ocupada. Ahora, con más líneas de móvil que personas, la única forma de rememorar estos aparatos es a través de las películas de detectives cuando algún malhechor quiere ponerse en contacto con alguien sin ser rastreado por la policía.
Aún a pesar de que la inmensa mayoría de jóvenes no haya utilizado una cabina en su vida, todavía se encuentran por las calles de la ciudad. Concretamente, en toda la provincia de Pontevedra todavía se pueden encontrar 277 cabinas de teléfono de Telefónica que se resisten a su más que anunciada extinción. De hecho, esta muerte, ya irreversible, tiene una fecha aproximada: en este semestre de 2021 entra en vigor la Disposición Transitoria Novena del Anteproyecto de Ley General de Telecomunicaciones, que regula la desaparición de este servicio, informa Telefónica.
Las cabinas telefónicas se usan ahora, de media, 0,17 veces al día, mientras que dos años atrás se computaban 0,37 llamadas
Aunque se desconoce todavía el plan de retirada, es un hecho que las cabinas telefónicas tienen sus días contados. Como hoy en día, la mayoría de habitantes tienen un teléfono móvil, nadie hace uso ya de este servicio. Claro, esta situación se podía predecir desde hace cinco lustros: ya en 2006 se registraron más líneas de teléfonos móviles que habitantes.
TOTAL DESUSO. Concretamente, a nivel nacional, desde estas cabinas se hacen una media de 0,17 llamadas al día, que no suponen ni dos llamadas cada diez días. Dos años atrás, estas cifras eran de 0,37 (un uso cada tres días), según datos de Telefónica, por lo que el declive de estos objetos es pronunciado y no tiene frenos.
El Ministerio de Transformación Digital convoca un concurso para su gestión, pero ninguna empresa se presenta
Aunque no se han facilitado datos concretos de uso en la ciudad de Pontevedra, cabe esperar que no iban a distar mucho de la media estatal.
SERVICIO UNIVERSAL. Así se consideran las cabinas telefónicas según la Ley de Telecomunicaciones, por lo que es obligatorio que cada población de más de 1.000 habitantes disponga de una y tenga una adicional por cada 3.000 a mayores, para así garantizar que cualquier persona tenga derecho y posibilidad a llamar por teléfono.
El Ministerio de Asuntos Económicos y de Transformación Digital convoca un concurso para la gestión de este servicio, pero como suponen una ruina, es Telefónica la que está en la obligación de ocuparse de las cabinas telefónicas de toda España hasta que, más pronto que tarde, se retiren de manera definitiva de todo el territorio.
